STAFF/Natalia Muñoz @NataliaMz
Autoridades educativas del bachillerato Centro de Educación Artística (CEDART), se pronunciaron respecto a la manifestación realizada por alumnos el viernes pasado, y afirmaron que las acusaciones exhibidas en el llamado «tendedero» fueron motivadas por una intromisión de intereses distintos a la comunidad estudiantil, que provenía desde el interior del plantel.
Señalaron que las denuncias estaban dirigidas a maestros ya jubilados y detectaron la presencia de personas ajenas a la institución participando en la revuelta.
«¿Rodolfo te parece correcto jugar a quitarse las prendas de ropa con menores de edad?», «Guadalupe Ruíz NO respeta las ideologías, obliga a los jóvenes a volverse religiosos», «Alejandra Rosas Armenta, ¿Te parece bien reprobar a alumnos porque no te caen bien?», fueron algunos de los mensajes colocados por parte de la comunidad estudiantil, al exterior del plantel Miguel Bernal Jiménez.
Por lo anterior, en un documento oficial acuñado por el Sindicato Independiente de Trabajadores de la Secretaría de Cultura y firmado por el representante del consejo general, el maestro Carlos Barajas González y la consejera de organización, la profesora Rocío Álvarez Lorenzana, calificaron de «extrema gravedad que acusaciones emitidas sin prueba alguna y desde el anonimato».
Sobre las quejas que van desde la labor académica, la logística, precariedad operativa, transparencia en el manejo de recursos, acoso y discriminación en la identidad de género, los agremiados destacaron:
«Corresponden a docentes ya jubilados, con quienes las actuales generaciones de estudiantes que cursan el bachillerato en nuestra escuela jamás tuvieron trato, e incluso a hechos sucedidos antes de su nacimiento», especificaron.
Además, detallaron que durante la protesta hubo actos vandálicos, como el auto de la directora, que fue rayado con palabras altisonantes, mientras que el vehículo de la secretaria académica también fue intervenido dejando un neumático ponchado.
«Las autoridades del plantel salieron a entablar el diálogo con quienes se manifestaban (…) sin embargo, las y los estudiantes se negaron a entablar el diálogo», afirmaron en el escrito.
Refrendaron el respaldo a la dirección, la secretaría administrativa y la secretaria del plantel, luego de ser acusadas de opacidad e indebido manejo de recursos.
Por último, solicitaron a la Subdirección General de Educación e Investigación Artística del INBAL (SGIA), la implementación de protocolos en la intervención para llegar a un acuerdo con las partes involucradas.
