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¿Quién no ha probado un helado cremosito o una paleta de “La Michoacana”? Estas delicias han trascendido fronteras, llegando a Estados Unidos a hacer felices a nuestros compatriotas que, por gusto o necesidad, han dejado México.
Así que, ¡no se preocupen! Al menos en Chicago, podrán disfrutar de estos helados y paletas, que más que alimentos, se vuelven un momento de goce y un lazo con la tierra Michoacana.
Para Alfredo García y su esposa Irma, propietarios de “Las Delicias de la Michoacana”, ubicada en la calle N. Clark, en Chicago, Illinois, la interacción con los clientes es una parte fundamental del trabajo. Ambos han pasado los últimos dos años perfeccionando las recetas de sus helados y paletas, que son elaboradas de forma artesanal por ellos mismos. Ahora comparten estos sabores con los habitantes de Chicago.
Alfredo García pasó de trabajar como carpintero a ser propietario de la peletería “Las Delicias de la Michoacana”. Expresó que detrás de la idea del negocio, algo le motivaba mucho: “quería iniciar algo en donde yo pudiera ayudar a otras personas”.
“Cuando ves a los inmigrantes llegar, puedes sentir el dolor que ellos sintieron al dejar su tierra y su familia. Entonces tratamos de darles un pedacito de esperanza, que sientan que pueden hacerlo, que pueden seguir”, dijo su esposa Irma.
La tradición heladera de “La Michoacana” se remonta décadas atrás a un pequeño pueblo en Michoacán, llamado Tocumbo, en donde estas peleterías forman una red de pequeños empresarios unidos por vínculos familiares, de parentesco y comunales.
