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Frank McKenzie, jefe del Comando Central de Estados Unidos, aseguró que el número de miembros de Al Qaeda en Afganistán “probablemente aumentó ligeramente” tras el retiro de tropas de Estados Unidos de dicho país en agosto pasado.
En una entrevista para Associated Press, McKenzie no quiso detallar un número determinado sobre cuántos integrantes de Al Qaeda se encontrarían dentro de Afganistán.
“Hay una presencia. Pensamos que era bastante pequeña, ya sabes, hacia el final del conflicto. Creo que algunas personas probablemente han regresado. Pero es una de las cosas que miramos”, refirió McKenzie.
El general estadounidense apuntó que algunos miembros de dicho grupo terrorista han regresado al país, lo cual ha sido facilitado debido a las fronteras porosas del país.
“Lo que nos gustaría ver de los talibanes sería una posición fuerte contra Al Qaeda. Creo que hay discusiones internas dentro de los talibanes sobre el camino a seguir”.
Según el jefe del Comando Central de los Estados Unidos frenar el extremismo y el terrorismo también será “complicado” por el hecho de que el reclutamiento tanto en Afganistán como fuera del país ya está en marcha tanto por Al Qaeda como por ISIS.
La comunidad internacional está preocupada por la trayectoria que ha tomado Afganistán y se ha absteniendo de reconocer a los talibanes como un gobierno legítimo, ante las preocupaciones sobre el resurgimiento del terrorismo y la posibilidad de que los derechos humanos retrocedan.
Las reticencias por ahora al reconocimiento de los Talibanes se basan en el incumplimiento de varios requisitos como la formación de un Gobierno inclusivo o el respeto de los derechos de las minorías y las mujeres, relegadas en parte al interior del hogar.
Además los talibanes consideran que su reconocimiento podría contribuir a que el Gobierno Estadounidense desbloquee los activos financieros (10 mil millones de dólares) del estado afgano actualmente retenidos por la Reserva Federal Estadounidense.
