Lupita Pasó Examen Para Medicina En UMSNH, Pero Le Niegan Acceso Por Su Condición

Me dejaron sin estudios a mí y a otros cientos o tal vez miles más, y negarles la educación

STAFF / Alejandra Hernández-@AleSolAleLuna

Su discapacidad nunca detuvo a María Guadalupe Garfias Rodríguez, una joven de 19 años de edad, originaria de Quiroga, pero la discriminación por parte de la Facultad de Medicina en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) sí le detuvo en sus estudios.

María o Lupita, como le dice su papá, usa silla de ruedas por la discapacidad que le generó una parálisis cerebral secundaria, sin embargo, ha logrado ser una estudiante e hija ejemplar, pero en la Universidad Michoacana no hubo espacio para ella.

La joven sí pasó el examen, pero aun así se le negó la aprobación por la falta de lugares por lo que interpuso una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), en donde vivió otro proceso de 30 días para ver si resolvían su caso, el cual finalmente falló a favor de la Universidad.

La queja fue presentada el pasado 18 de agosto en contra el personal de la Universidad por el concepto de Violación al Derecho a la Educación a Lupita, atribuible a su discapacidad, sin embargo, la dependencia dio razón a la UMSNH en su argumento

“Simplemente significa que tengo capacidades diferentes de movilidad (…) he cursado y aprobado todos los estudios de educación básica y media superior de manera satisfactoria e incluso, he ampliado mis propios cursos (…) participé en el curso de inducción, el examen sicométrico y el 18 de junio pasado realicé mi examen de admisión en Ciudad Universitaria”, argumenta ella en su queja.

Por su parte, la Universidad Michoacana argumentó ante la CEDH que la joven no fue aceptada en la carrera de Médico Cirujano y Partero ya que sólo cuenta con 475 lugares para aspirantes, por lo que, a pesar de aprobar el examen, la puntuación no alcanzó para un lugar como pasa con cientos de estudiantes.

“Se determinó que la capacidad de atención educativa que sustentó es de 475 lugares para aspirantes provenientes de bachillerato local y 50 lugares para aspirantes provenientes de bachillerato cursado fuera del estado, por lo que la puntuación obtenida resultó insuficiente para quedar dentro”, señala la respuesta de la UMSNH ante la CEDH.

Pero ahí no terminó la intervención de la Casa de Hidalgo, que en su lugar le ofertó a la joven y su familia, manera opcional, el ingreso a otro espacio: la Licenciatura en Salud Pública, cuyo programa es afín al del médico.

Esta noción de la UMSNH fue aceptada por la dependencia de Derechos Humanos, e indicó que no hay agravios en contra de la joven estudiante por lo que el caso fue archivado.

“Esta Visitaduría se declara carente de materia para continuar conociendo del expediente de queja, toda vez que de las constancias que integran el expediente se desprende que no se ha vulnerado a la quejosa, Derecho humano alguno, cuyo examen de admisión su resultado no fue suficiente para hacer aceptada”, refiere la última contestación a la joven y su familia.

A partir de entonces y previendo la falta de atención verdadera por organismos de Derechos, la joven y su familia reiteran la discriminación por ambas dependencias, las cuales, acusan desde esta redacción, que se siguen sin incluir en los programas educativos a las personas con capacidades distintas.

En entrevista, Lupita confesó que no parara hasta conseguir otra oportunidad para seguir estudiando sobre todo en una carrera que le apasiona, ya que es buenísima en química, además de qué su lucha es por la apertura a más espacios que brinden las oportunidades para todos independientemente de si tienen o no alguna discapacidad.

“Les falta mucha cultura de la inclusión, aún no entienden que es más difícil para nosotros que tenemos otra condición, pues vamos, pero no entienden que se necesitan más espacios y no sólo las que determinan por sus conveniencias”, recalcó la joven cuadro de honor de su escuela.

Finalmente, recordó que seguirá peleando por obtener más espacios inclusivos, para hacer énfasis en la falta de capacidad del sistema educativo que deriva en dejar sin estudios a miles de jóvenes entusiasmados por estudiar, quienes no tienen las mismas posibilidades que otras personas.

“Me dejaron sin estudios a mí y a otros cientos o tal vez miles más, y negarles la educación a aquellos que merecen una segunda oportunidad, como a mí me la negaron, no es Justo, voy a seguir peleando por más espacios para mí, para todos”, finalizó.

Botón volver arriba