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Tras el secuestro de cinco personas que realizan labores de seguridad en la comunidad de Santa María de Ostula, en el municipio de Aquila, tanto los titulares de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) y de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), José Martín Godoy Castro y Juan Bernardo Corona Martínez, no lograron ponerse de acuerdo para nombrar el cargo de los comunitarios.
En tanto que Corona Martínez afirmara que dichas personas no son policías, posteriormente Godoy Castro aseveró que sí son policías, a lo cual el Gobernador, Silvano Aureoles Conejo entró a dicha discusión al negar de manera tajante, que “no son policías”, sino son ciudadanos.
“Los cinco ciudadanos ellos no son policías, son comunitarios que han hecho labores de vigilancia, a nosotros no nos han desaparecido ningún policía”, al explicar que, en dicha comunidad indígena, debieron de optar por hacerse cargo de las funciones que el gobierno debió de tomar.
Aureoles Conejo afirmó que se ha estado manejando mal dicho caso, “pues no son policías, son ciudadanos que hicieron tareas que no les correspondían, y que ahroa ya les llamaron así, pero no es así. Pues ellos se hacen llamar policías comunitarios”.
Al cuestionarle que ha sido el propio procurador quien afirmó que son policías, el mandatario aseveró, “pues mal dicho, mal dicho pues”, dijo el gobernador al ser cuestionado si en todo caso Godoy Castro está mal informado sobre el tema.
