Mariano Bolaños Montañez/@MayacoBM
Si has sentido que durante estas fechas tu ánimo y humor no están del todo bien, si te sientes cansado y tristón, tal vez sufras alguno de los síntomas de una depresión estacional.
En entrevista para Changoonga.com, la Psicóloga Liz Gómez, nos cuenta todo lo que necesitas saber sobre este padecimiento común en esta época invernal (finales de noviembre a mediados de enero), cómo tratarlo y cómo prevenirlo.
La Crisis Estacional se puede catalogar de dos formas: de forma fisiológica, la cual se manifiesta un cambio en cuanto a los cambios climáticos, específicamente de la luz, lo cual desencadena cambios en la calidad de sueño, el hambre, el descanso y otros factores que afectan la calidad de vida del ser humano; de igual manera, de forma social, la cual surge con el análisis hecho de todo lo que se hizo durante el año, y se hace un balance de los objetivos alcanzados y de los no alcanzados.
En esta última, Liz comenta que la publicidad impacta en varios casos continuamente el estado de ánimo, los objetivos no cumplidos, las frustraciones de los fracasos, el trabajo personal y físico que no se hizo durante el año.
En resumen, son dos los grandes factores que inciden en una Crisis o Depresión Estacional: el cierre de ciclos y el clima frío:
“Por cada cuatro mujeres, un hombre presenta depresión”, comenta la psicóloga, quien confirmó que en estas épocas es más común las crisis estacionales, lo que desencadena mayores suicidios en estas temporadas, a pesar de que no existen cifras al respecto.
¿Cómo se manifiesta una Depresión Estacional?
La depresión como tal, tiene síntomas desde pensamientos irracionales, pensamientos fatalistas, baja autoestima descalificación de uno mismo, hay poco sentido de pertenencia a un lugar, poco sentido de vida, falta de motivación, hay un aumento en la devaluación, mucha tristeza, puede ser que haya falta de apetito y por consecuencia pérdida de peso, pérdida del placer, falta o exceso de sueño, son algunas de los síntomas generales de una Depresión Estacional, según comenta Gómez.
Sin embargo, también expone que son rasgos a grandes generalidades, pues se pueden mafinestar de diversas formas:
“Lo clásico son estos síntomas; el aislamiento es lo primero que se nota en general: no empiezo a convivir, me empiezo a encerrar, no me baño, no como, no me lavo los dientes, no me cambio (…) pero hay personas que muchas veces la Depresión no la manifiestan así, sino la manifiestan con ansiedad o con enojo”, comenta.
Expone que el sector más afectado por estas Depresiones Estacionales, es el sector adulto “por arriba de los 25 a 35 o 40 años”; es más alto en mujeres generalmente, pero en temporada estacional suele ser mayor en hombres que en mujeres, comenta.
¿Qué se puede hacer ante una depresión estacional?
Según lo expone la psicóloga, una persona con Depresión Estacional “no puede hacer nada” al respecto para apoyarse a sí misma, hablando propiamente del trastorno, porque ni siquiera va a conseguir la motivación para moverse:
“En un estado depresivo profundo ni siquiera me voy a matar; tú le puedes dar una pistola a una que diga “me voy a matar” y si está deprimida no lo va a hacer, porque no hay ni el ánimo ni la motivación para hacerlo; una persona que se suicida, lo hace cuando empieza a salir de la depresión, es entonces que tenemos que empezar a tener mucho cuidado con esa persona. Ahí sí, alerta y foquitos amarillos”, dice.
En un primer momento, menciona la profesionista, hay que hacer que la persona se mueva, y para eso se puede recurrir “a veces” a apelar al orgullo de la persona, a moverlo a actividades solidarias, para concientizar a la persona que siempre hay alguien que necesite más que uno.
De igual manera, sugiere actividades que propicien la reflexión y en donde la persona tenga un punto de reconocimiento desde lo que sí logró: “eso es en un punto inmediato, pero en un proceso de depresión, lo primero que se tiene que tocar es un psiquiatra que dé medicamento para controlar el síntoma fisiológico, pero eso no va a quitar la causa; tiene que ir acompañado de un proceso psicológico para trabajar el síntoma emocional real”.
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