STAFF / Matilda Martínez
Carlos Alberto Vieyra Vargas, sobreviviente de la tragedia que acabó con la vida de 26 personas en un accidente automovilístico entre una pipa de combustible y autobús comercial, reveló que al momento del percance dos jóvenes usuarios de la carretera se acercaron con extinguidores pero se rehusaron a ayudar.
Con lágrimas en los ojos, el joven que fue calificado por sus propios familiares como un héroe, por lograr sacar del autobús antes de que se incendiara a 10 personas, entre ellos varios niños, narró el momento en que se percató de la presencia de dos hombres que portaban extinguidores.
Relató que al momento del incidente “empecé a sacar a la gente y los dejaba abajo del autobús, se acercaron dos chavos con extinguidores, yo les dije préstenmelos, yo soy el del accidente y prefirieron darse la media vuelta e irse, no me quisieron ayudar, yo seguí sacando los cuerpos”.
Varias versiones han manejado que en el lugar del accidente, usuarios que transitaban por la vía, en lugar de ayudar a los heridos, prefirieron grabar con sus teléfonos celulares.
Únicamente el joven Carlos Alberto que no sufrió ninguna herida de gravedad, arriesgo su vida para poner a salvo a 10 personas, entre ellos uno de sus hermanos y su abuelita.
Sin embargo, no logró sacar del autobús a su madre, que murió al interior del automotor calcinada.
El joven aclaró que el tracto camión que transportaba 40 mil litros de gasolina, no impactó al autobús por la parte trasera, por el contrario afirmó que el encontronazo fue de frente, cuando la pipa invadió el carril dónde transitaba la unidad con las familias morelianas.
Narró que el autobús transitaba tranquilamente y no había tráfico alguno, tras concluir una llamada telefónica, percibió que intempestivamente el tracto camión invadió el carril por donde transitaban y únicamente alcanzó a intentar detenerse.
El joven salió disparado entre los asientos del autobús, pero las lesiones no pusieron en riesgo su vida e inmediatamente empezó a sacar a los heridos, salvando a 10 personas, entre ellos varios menores de edad.
