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Tras el asesinato de Luis Manuel González y Osvaldo Rendón, director y subdirector de Tarímbaro, cerca de diez elementos de la policía municipal rindieron declaración.
Para esclarecer los hechos en los que los mandos policiales fueron asesinatos, los elementos de la policía acudieron al Ministerio Público para rendir sus declaraciones con respecto a la última vez que los vieron, así como las actividades y las horas previas de su muerte.
Por su parte el alcalde de Tarímbaro, Benjamín Páramo dio a conocer que Luis Manuel González ya había recibido amenazas por parte del crimen organizado, así como había desaparecido desde un día antes de su asesinato.
Asimismo el presidente municipal dio a conocer que ante la muerte de los mandos policiales, podría pedir solicitar mando federal para hacerse cargo de la seguridad del municipio.
