Se trata de una obra de alto impacto social sin parámetro a nivel nacional en beneficio de una comunidad con índices de marginación
STAFF/ Elly Castillo -@ellycastillo / Eliza Flores
¿Te imaginas ser michoacan@ y haber estudiado en una primaria PÚBLICA con alimentos, ropa, con atención psicológica y nutricional además de formación músical, tecnológica, bilingüe y atención personalizada, sin costo alguno para tus papás? O, imagina más bien que tus hijos pudieran cursar sus estudios en un lugar así..!
Eso suena a un sueño, a una utopía, a algo de otro país de primer mundo, y en efecto, el modelo educativo retomado de países europeos, se pondrá en práctica en la renovada escuela primaria Josefa Ortíz de Dominguez, adscrita a la Secretaria de Educación en el Estado (SEE) ubicada en la comunidad de El Testarazo, perteneciente al municipio de Tacámbaro, la cual duplicará su matrícula de 180 a 360 alumnos, niños, habitantes de ese poblado, que serán atendidos de manera integral gracias al financiamiento empresarial.
Se trata de un proyecto personal, de un sueño particular del empresario aguacatero Valentín Rodríguez, quien en conjunto con sus socios de Estados Unidos invertirán tres millones de dólares para hacer de la Josefa Ortíz de Dominguez “la escuela más chingona”, no sólo de Michoacán, sino de todo el país, afirma tajante su benefactor:
UNA ESCUELA PÚBLICA QUE TENDRA MEJORES SERVICIOS QUE CUALQUIER COLEGIO PARTÍCULAR
“Queremos hacer una escuela única, tener el mejor modelo educativo, la mejor infraestructura, el mejor edificio” asevera don Vale, como de cariño le llaman en la comunidad la cual está expectante por la magnitud de la obra que luce enormes y gruesas vigas de acero colocadas por medio centenar de trabajadores, arquitectos, albañiles y chalanes que laboran arduamente con enjundia para tener listas las instalaciones para enero -febrero, cuando sea decretado el regreso a las aulas ante el fenómeno de la pandemia que se vive en el país.
¿Y por qué invertirle a una escuela pública? se le cuestiona a Rodríguez Gutiérrez, al ser uno de los principales exportadores no sólo de aguacates sino también de berries:
“Me puse a pensar, a reflexionar. que debíamos hacer algo por la educación. Queremos transformar la vida de 360 niños que aquí estudiaran pero también se les transformara su vida, comenzaremos a forjar su futuro, para hacer niños y jóvenes felices y en el futuro tengamos adultos responsables, transformadores de sus familias y de su entorno”, compartió.
GENERAR NIÑOS SANOS PARA ALEJARLOS DE LAS TENTACIONES CRIMINALES
El también ex exalcalde de Tacámbaro y exdiputado local agrega que tuvo que convencer a sus socios a que le entrarán a la obra: “Les dije ‘métanle a la mejor inversión que tendrán’ y los convencí de que aportarán para reconstruir esta escuela y compartirle a la comunidad las oportunidades de desarrollo que nos brindan, es parte de nuestra responsabilidad social, no todo puede ser para nosotros, debemos compartir con la gente”, manifiesta con firme convicción de sus palabras.
“La gente está muy contenta por la obra, los frutos de la inversión será ver a niños contentos, felices. La educación es la mejor herencia que podemos dejar a nuestros hijos, a los niños que se educarán aquí y serán los adultos del futuro. Se les generará conciencia y valores, los alejaremos de la necesidad de engancharse con los delincuentes, con los criminales, no tendrán carencia de vestido, de comida, de atención psicológica, que también incluirá a sus padres, para que crezcan en hogares seguros, sanos” asevera don Valentín al tiempo que reafirma de manera contundente: “Será la mejor escuela primaria no sólo de Michoacán sino de todo el país!”.
