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La tristeza y la calentura invadieron a un pescador de Puerto Progreso, Yucatán, quien luego de quedarse sin esposa porque ésta lo abandonó, el hombre determinó robarse un perro para violarlo y saciar sus instintos.
Martín Gabriel Crespo González, robó el perro de una vecina para saciar sus instintos sexuales. El ataque sexual fue tan brutal que le causó un severo desgarre al can por lo que fue detenido por estos hechos y ahora enfrentará proceso ante el Juzgado Segundo Penal por robo calificado y maltrato o crueldad en contra de los animales domésticos, por denuncia de Cinthya Pérez Avila, dueña de la mascota, pudiendo alcanzar hasta 15 años de prisión según la legislación estatal.
Las investgaciones refieren que los hechos ocurrieron este lunes cuando Martín Gabriel pasó por la calle 37 de la colonia Feliciano Canul Reyes, donde encontró a las puertas de una casa un perrito maltés color café, de unos 8 meses de edad.
Ante lo cual el zoofilico lo desató y se lo llevó a una antigua congeladora de una calle más adelante donde el sujeto vive como vagabundo. Para su mala fortuna al robar el perro, fue visto por una vecina quien le avisó a la dueña del animal y en compañía de otras personas fueron tras el ladrón.
Una vez en la congeladora, el sujeto se bajó el pantalón y violó al perrito, aunque interrumpió el acto zoofilico al escuchar a la gente llegar. La dueña del animal se percató que la mascota sangraba por la cola, de manera que dedujeron lo que había sucedido, por lo que dieron parte a la Policía de Progreso.
No obstante que Martín Gabriel negaba la violación, el perro fue llevado con un médico veterinario zootecnista, que certificó el abuso.
Los agentes detuvieron al pervertido pescador quien ya rindió declaración preparatoria y negó los hechos. Dijo que vive sólo porque su familia lo abandonó y se fue a vivir a Chiapas, pero reiteró que nunca violó al animal.
*Con info de formalprision.com