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Felipe Calderón se despidió de sus paisanos como Presidente de México con un ¡Qué viva Morelos y Qué viva Michoacán!
Al rendirle por última vez homenaje a José María Morelos y Pavón como Presidente de México, aseguró que ha sido un orgullo profundo e inigualable servir a Michoacán en estos años.
“He puesto siempre todo mi empeño y mi dedicación, hasta el límite de mis capacidades y limitaciones: alma, corazón y vida, pensando en Michoacán.
Asimismo destacó lo hecho en salud y educación por amor a la tierra que vio nacer al Padre del Estado Mexicano.
“Hemos luchado sin descanso y con denuedo por defender la libertad, la propiedad y la integridad, la vida de los michoacanos frente a los criminales que las amenazan”.
Felipe Calderón hizo votos porque a pesar del cambio de Administración Federal, Michoacán siga recibiendo, cuando menos, el mismo monto de recursos que durante estos años se le han destinado.
“Hoy, le agradezco a todos que me hayan permitido servirles. Y seguiré trabajando con ustedes, hombro con hombro, de ciudadano a ciudadano, para seguir abriendo camino a éste, nuestro gran estado; el Jardín de la Nueva España de Morelos.
Hoy, nos une, como siempre, el recuerdo prodigioso del más grande los hijos de la tierra, de esta tierra y de México.
Que nos una siempre la historia, el pensamiento y el amor a la Patria del Generalísimo José María Morelos y Pavón, el Siervo de la Nación”.
Felipe Calderón hizo un recuento de las grandezas del Padre del Estado Mexicano, ya que además de contribuir en la lucha de Independencia, procuró la Constitución de Apatzingán en 1814.
“Y la mejor forma de honrar su memoria es cumpliendo a cabalidad los sueños por los que ofrendó su vida”.
Momentos antes colocaron una ofrenda floral en la Casa Natal de Morelos, donde partieron en bando solemne al Jardín Morelos.
