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En la Ciudad de México, un abuelito de nombre Juan entró a rezar de rodillas a una iglesia, sin embargo al poco tiempo el hombre murió frente al altar, por lo que el párroco celebró una misa de cuerpo presente esa misma tarde en compañía de varios feligreses.
De acuerdo a la información de ACI Prensa, se pidió una ambulancia para el hombre, sin embargo, se percataron de que el hombre ya no presentaba signos vitales.
“Juan vino por su propio pie a su Misa de cuerpo presente. Que es la muerte de los justos, una muerte sin sufrimiento. Juan tuvo la fortaleza y el ánimo de venir a la casa de Dios a dar su último suspiro”, señaló el párroco Sajid Lozano.
De acuerdo a los paramédicos, la muerte del hombre se debió a un infarto fulminante al corazón y que no tenía signos de violencia.
Finalmente, un joven reconoció el cuerpo y fue acompañado por las autoridades hasta la casa de uno de sus hijos, quien fue hasta la iglesia a despedir a su padre.
