Los sacrificios humanos en la antigüedad
Por Fernando Juárez “El Sargento”
Existe un mito donde 2 padres tuvieron 13 hijos, algunos de estos hijos se creían superiores a los demás y comenzaron a crear criaturas contra la voluntad de los padres, dicha falta hizo que los expulsaran del cielo y los enviaran a la tierra donde reinaban las tinieblas.
Los 2 hijos expulsados al principio se sentían bien en la tierra pues se habían alejado del yugo que los mantenía con restricciones de todo tipo, se cuenta que un día decidieron crear al hombre para que les sirviera y los adorara, desafortunadamente les dimos tanta flojera que mejor se arrojaron al fuego.
Lo que ellos no sospechaban era que una vez que se quemaron perdieron el cuerpo material y se volvieron “ligeros” lo que les permitió regresar al cielo con sus padres y hermanos, a grandes rasgos este es el primer sacrificio ritual que se logró “documentar”. Por cierto, esos hijos eran los dioses del Sol y la Luna.
Desde ahí el sacrificio ritual se volvió común y obligado, se tenía la creencia de que nuestros sacrificios eran una forma de pagar una deuda con los dioses que nos cuidaban, al principio eran de frutas, animales, joyas o metales preciosos, pero tuvo que llegar una persona que se animó a sacrificar un ser humano, no se sabe a ciencia cierta el motivo, imagino por codicia o para ver que le daban los dioses, al parecer le fue bien porque desde entonces la moda fue sacrificar gente.
Los pueblos antiguos llegaron a tener un catálogo de más de 100 muertes rituales aprobadas y garantizadas para que los dioses te dieran su bendición y ayuda, una de las más raras que pude encontrar fue que se aventaba a gente fuerte en hogueras gigantes, se creía que la persona se volvía una estrella y ayudaba a sostener el cielo y protegía a todo el pueblo, se me olvidó decirles, casi siempre para este sacrificio la gente era voluntaria.
Los rituales antropofágicos eran muy comunes entre los aztecas, se tenía la creencia que al comer un poquito de la carne del sacrificado dicha persona nos cuidaría y estaría con nosotros siempre.
Casi siempre el sacrificado era voluntario pues se consideraba un honor que traía prestigio y buena fortuna, aunque hay que mencionar que los antiguos ya usaban anestésicos muy potentes para que la persona no sintiera nada, se dice que la persona iba bailando y riendo mientras se dirigía al templo, pues se cuenta que antes de morir se podía ver a los dioses directamente al rostro.
Me pongo a pensar en el nivel de compromiso y entrega que tenía la gente con su pueblo y sus creencias, ofrendaban su vida con tal de que a todos los demás los dioses los ayudaran y les sonrieran, si bien existía prestigio y honor eran beneficios intangibles, en realidad no otorgaban nada material, tan solo la satisfacción de que hiciste tu parte por el bien de los seres que te importan.
PD- FELICIDADES A CHANGOONGA, vienen más éxitos y logros pues son un equipo trabajador y comprometido, pero mejor para estar seguros hay que ir buscando voluntario para la ofrenda.
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