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El pasado domingo 7 de abril, una chica intentó aventarse desde un puente con una altura de 100 metros, oficiales que llegaron al llamado hicieron lo imposible para que no se aventara.
“No lo vaya a hacer. La vida es muy bonita. Deme la mano. Piense en su mamá, en su papá en su familia”, dice un agente, en un intento de calmar a la mujer.
Los oficiales que se encontraba ahí no dejan de intentar persuadir a la chica, uno de ellos logra sujetarla, ella fue llevada a la unidad de salud mental en un hospital de la ciudad.
Algo curioso del caso es que, en febrero pasado, Jessy Paola Moreno Cruz, de 32 años de edad, se lanzó de la estructura con su hijo de 10 años que cargaba en brazos. Ambos fallecieron y las autoridades aseguraron que lo hicieron por motivos económicos y, además, la mujer terminó una relación sentimental recientemente.
Por este motivo, policías ya reforzaron la vigilancia en la zona. Habitantes locales aseguran que existen “demonios” que convencen a la gente de suicidarse en dicha construcción.
