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Una joven de 19 años que había dado a luz, fue diagnosticada con COVID-19 y luego falleció, sin embargo, familiares dudan de lo sucedido y pedirán una investigación.
Los hechos tuvieron lugar en Tamaulipas, trascendió que Leivy Monserrath, oriunda de la comunidad Río Tamiahua, en el municipio de Altamira, ingresó el domingo pasado al Hospital Civil de Ciudad Madero porque estaba a punto de aliviarse.
Sin embargo, ese domingo fue el último que vieron a Leivy, ya que en el nosocomio le diagnosticaron coronavirus y por protocolo ya no dejaron que su familia la viera, ni siquiera cuando murió.
Cuatro días después de haber sido internada, le entregaron una urna con cenizas a sus familiares.
Amelia y Paola, madre y hermana de la joven fallecida, desconfían del diagnóstico que recibió la joven. Señalan que los informes mencionaban una hemorragia a las pocas horas de haber dado a luz a una niña de casi 4 kilos, por parto normal.
Asimismo, mencionaron que no había tenido síntomas de COVID-19, y que se había estado cuidado del virus por su embarazo, por ello, especulan con que se trataría de una negligencia médica, que quieren encubrir con un caso positivo de COVID-19. De ahí que alzaron la voz y exigen que pronto comience una investigación del caso.
