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El miércoles pasado se cumplieron tres años de que civiles se levantaron en armas en contra de Los Caballeros Templarios que se autonombraron como Grupos de Autodefensas, por lo que en su tercer aniversario y desde la cárcel, quien fungiera como uno de los líderes de dicho movimiento, José Manuel Mireles Valverde, aseguró que este año no hay nada que celebrar.
“No tenemos nada qué festejar, el Gobierno Federal nos dejó solos, y peor, desarmados y en manos del crimen organizado”, refirió desde el penal de Sonora, Hermosillo.
Sin embargo resaltó el hecho de que los municipios principalmente de la región de la llamada Tierra Caliente, se levantaran en armas, “es digno de festejar que los pueblos despertaran justo a tiempo”, aunque dijo que fue muy doloroso, pero “nos dimos cuenta de nuestra grandeza”.
Con una voz ronca, el doctor de profesión y quien entabló una conversación vía telefónica esta mañana con su hermana Virginia Mireles, resaltó en específico de un día de lucha de las autodefensas, cuando un niño de tan solo 14 años de edad, “atacó, hizo correr a los perros (sicarios) que iban en seis camionetas, eso es digno de festejar, cuando un pueblo ya cansado se sacude”.
Mireles Valverde dijo además que cuando los Grupos de Autodefensas tenían el control de 36 municipios “jamás se perdió una aguja”, mientras que en la capital michoacana hace algunos años, dijo había 100 robos de carros por día, 20 asesinatos, y miles de robos, cuando eran “civiles ajenos al uso de armas y leyes, teníamos limpio y controlado nuestra situación”.
Para finalizar la conversación con su hermana desde el penal de Sonora, Mireles resaltó que “no hay más” que echarle ganas, mientras que dio fin a su mensaje con lo siguiente: “dije que este año ya no iba a volver a pelear, pero ya no quiero pelear ya, quiero la paz de la nación”.
Mireles Valverde fue detenido con sus escoltas el 27 de junio en Lázaro Cárdenas, Michoacán, en posesión de rifles de asalto que registraron ante la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) en un proceso para regularizar la lucha de los autodefensas contra el cártel de Los Caballeros Templarios
