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El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, recalcó que no habrá privilegios para nadie en las investigaciones que se hacen sobre el robo de combustible en el país.
Lo anterior lo puntualizó en la rueda de prensa matutina de este miércoles: “Decirles que no se va a permitir la corrupción ni la impunidad y se está investigando todo lo relacionado con ello y de manera especial todo lo relacionado con el robo de combustible, a todos, todos los que intervienen en la distribución, en la venta y en la vigilancia, a todos”.
Asimismo, subrayó que las pesquisas se hacen con total responsabilidad: “No queremos alebrestar, no queremos hacer escándalo, no queremos el sensacionalismo, queremos actuar con mucha responsabilidad, no habrá impunidad, trátese de quien se trate, pero sin shows, y también sin afectar la dignidad de las personas, no fabricar delitos, no usar el gobierno con propósitos políticos, no porque me piden castigo a los responsables dé una instrucción al secretario de Seguridad Pública, al director de Inteligencia Financiera o sugerir amablemente al procurador que se actúe en contra de un persona, todo va a ser a partir de pruebas de investigación, pero en general, sin privilegios para nadie”.
López Obrador adelantó que el Ejército Mexicano podría encargarse del traslado del carburante: “La Secretaría de la Defensa también tiene un sistema de transportación y queremos vincular la transportación con la vigilancia, pipas protegidas que ante cualquier emergencia no falte el combustible”.
Igualmente habló sobre la compra de 500 pipas para la transportación del combustible: “Acerca del costo de las pipas tenemos el recurso que se necesita, vamos a esperar la cotización, interviene en la compra de estas 500 pipas la Oficial Mayor de Hacienda, Raquel Buenrostro; Irma Eréndira, secretaria de la Función Pública y Graciela Márquez, secretaria de Economía. Se hará de conformidad con la ley y pedirles a los empresarios del transporte, a los especialistas, a la gente que tiene información que nos ayuden dando a conocer sobre el mercado de las pipas, tanto en México como en Estados Unidos”.
También puntualizó que atacar el robo de gasolina no es sólo un asunto tecnológico sino de voluntad: “No es un asunto tecnológico, a veces sonaba la alarma y estaba todo el día sonando y no se hacía nada, no había voluntad para enfrentar el problema. El equipo de Pemex es de lo más moderno del mundo, ahora es que se utilice bien y que se le haga caso a la alarma, se puede advertir claramente cuando se baja la presión, esto del ducto de Tula-Toluca que se llena y al poco tiempo se queda sin presión es porque se chupan todo el combustible porque a lo largo del ducto tienen las instalaciones para robarse el combustible, hoy no se abren los ductos si no se tiene vigilancia para evitar el robo”.
