Señor, ¡se le cayó!

Por Isabel Felicidad

El otro día en mi paseo matutino para hacer pis, iba  admirando el paisaje, viendo a la gente pasar, los niños que van a la escuela, personas apuradas a su trabajo, etc., y de pronto un señor que iba desayunando un pan de esos que venden en la tienda del osito blanco, el cual devoraba con gusto, (hasta se me antojó y he de confesar, se me escurrió la babita) pero va siendo mi enorme sorpresa al ver que al terminar de engullir su panecillo, el señor agarra la envoltura y con el mayor descaro la deja caer al suelo.

¡Válgame! Yo soy un perrito y sé que eso no es correcto, ¡¿cómo es posible que el señor lo hubiera hecho?! Me dieron ganas de morderle un tobillo para obligarlo a recoger su basura, ¡qué se cree!

¿Acaso no sabrá el daño que causa a todos con lo que hizo?, porque no sólo se ve feo sino que contamina, tapa las coladeras, que como consecuencia en época de lluvias provoca inundaciones; y claro que habrán muchas personas a quienes no les interesa o piensan “qué perrito tan exagerado”, pero es real, si todos los seres humanos que viven en la Tierra pensaran que no pasa nada por un solo papelito que tiran en la calle, ¡en poco tiempo estaríamos cubiertos por pilas de basura!

Y no sé ustedes, pero yo pienso que eso no estaría para nada padre, porque hasta donde entiendo a las personas no les gusta vivir entre la basura y la mugre. Entonces, ¿por qué hay personas que hacen esto de tirar sus basuritas en las calles? ¿Flojera? ¿Falta de educación?, cualquiera que sea la causa, por favor evítenlo, e inviten a otras persona a hacer conciencia de lo que implica tirar basura en las calles;, cuando salgo a la calle mis hermanas o mi mami cargan bolsitas donde recojen mis popis para que no se queden regadas por toda la colonia, imagínense si no lo hicieran ¡fuchi!.

Y si se encuentran como yo a alguien en la calle que tira basura, sólo acérquense y díganle amablemente “Señor, se le cayó”, a ver si al menos por vergüenza lo levanta, y recuerden que en esta “Perra Vida” a nadie le gusta vivir en la cochinada, así que la próxima vez que vayan echar basura en la calle imaginen cuanto les dolería que les mordiera un tobillo y evítenlo.

Twitter:  @IsabelFelicidad

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