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Una vez aclarado el punto de que el asesinato del padre Gerardo Flores tendría que ver con el robo de la camioneta que utilizaba, el obispo auxiliar de Morelia, Herculano Medina, descartó que haya una especie de persecución contra sacerdotes, esto tras declarar que son tres casos de asesinatos o desapariciones de sacerdotes en los últimos años en Michoacán.
«Consideró que no es una persecución declarada contra la Iglesia, ni contra la jerarquía de la Iglesia, no es por ser sacerdotes que nos estén persiguiendo sino más bien son casos aislados. Si fuera una guerra contra la Iglesia seríamos más a los que nos hubieran privado de la vida. Han sido eventos aislados, no vinculados unos con otros», puntualizó el prelado.
Sobre si pedirán algún tipo de seguridad especial dijo que hasta el momento no se ha considerado tal petición a las autoridades y señaló que a veces la misma Policía tiene vínculos con la delincuencia, por lo que el hecho de estar custodiado no garantiza la seguridad. «A veces es dudoso, no sabemos a quienes nos envían y qué vínculos tengan», puntualizó el prelado.
Recordó que en el caso de la desaparición del padre Santiago de la Arquidiócesis de Zamora no se tienen resultados de las investigaciones de la Procuraduría y señaló que tampoco se encontró su vehículo y pareciera que ya le dieron carpetazo al tema. En el caso del Padre Alfredo, cuyo cuerpo fue encontrado Ben la carretera que va de Puruándiro a La Piedad tampoco se tienen resultados al respecto.
Añadió que para la Procuraduría «hay casos que les interesan y casos que no les interesan», por lo que consideró que hace falta mayor capacidad del personal de esa institución pues hay mucha gente que no sabe qué ha pasado con familiares desaparecidos.
Agregó que debe haber una depuración a conciencia de los cuerpos policiacos e incluso militares, pues existen casos donde miembros de cuerpos de seguridad están involucrados en asuntos delictivos, por lo que la sociedad ya no sabe de quién cuidarse, dijo.
«Basta ver los diarios, aparecen por lo menos cinco casos diarios de personas que mueren en contextos de violencia. Y no todos los casos se publican. Nosotros no podemos aceptar que los homicidios van a la baja, no podemos consolarnos diciendo que en otros estados están peor que en Michoacán», añadió.
