STAFF/ Margarita Arreola-@Arreolamargui
Isabel y Teresa, son vendedoras de cascarones de huevo llenos de confeti y harina utilizados durante el carnaval, actividad que les lleva un año poder juntar los huevos suficientes para decorarlos y ponerlos a la venta.
Además de ser vecinas de la colonia Rector Díaz Rubio, son comadres y narran que desde muchos años atrás venden huevos llenos de confeti, esta ocasión su mayor venta fue durante el desfile de toritos de petate en el centro de Morelia el pasado sábado, sin embargo, hoy en martes de carnaval esperan acabar los cascarones.
Les lleva 12 meses coleccionar las cáscaras de huevo que en su mayoría son del consumo diario de sus familias y que una vez que son lavados y secados se les agrega harina o confeti.
«El día que comemos huevo juntamos las cáscaras después las pintamos y vendemos a 10 pesos 7 huevos», apuntó doña Isabel.
En las cajas de cartón se observan montones de cascarones pintados de diferentes colores que vende en la calle durante el carnaval previo al miércoles de ceniza, actividad que les genera un ingreso a las mujeres y que además les ayuda como terapia de manualidades.
«Es una terapia para nosotros, cuando estas nervioso te pones a pintar y tapar los cascarones y se te pasan los nervios», comentó entre risas la vendedora.