STAFF/ Margarita Arreola/ @ArreolaMargui/Fotos vía @MayacoBM
Los viernes Santos, son considerados de luto en la religión católica, por lo cual no hay misa y para indicar las actividades religiosas se utiliza el ruido de una matraca de madera de más de 100 años que simula los repiques de la campanas.
La matraca ¡No es un espectáculo! Por lo que la cofradía de los matraqueros pide respeto, independientemente de las creencias, pues en otras ocasiones mientras se espera la procesión del silencio, la gente que había llegado desde temprano se desesperó y empezó a chiflar para que sonaran la matraca, olvidando el luto de las creencias religiosas.
En la catedral de Morelia, la matraca de madera tiene más de 160 años de antigüedad y según explicó el mayordomo de la Cofradía de los matraqueros, Omar Guajardo, el funcionamiento es de la siguiente manera: tres repiques por la mañana del viernes santo que inician a las 10:30 am, 15 a las 11 de la mañana y 11 en punto, indicando el inicio del viacrusis al interior de la Catedral.
Por la tarde a eso de las 4:30 su función es anunciar el inicio de la Procesión del Silencio y acompañar el recorrido que pasa frente a la Catedral, en esta ocasión se toca por más de 15 minutos, para lo que se requiere de dos personas que serán sustituidas en pocos minutos debido al peso de la matraca, la cual tiene una forma de estrella de picos que al girar los mazos de madera pegan en la tarima provocando el ruido.
La cofradía que se encarga de esta labor año con año, tiene actualmente 46 miembros que se apoyan entre sí para hacer sonar la matraca, todos son varones y no dejan subir a mujeres sobre todo en viernes santo, por la reducción del espacio, razón por la que tampoco subieron medios de comunicación.
