STAFF/ Eliza Flores
El 95% del transporte público en sus puertas llevan letreros piden a los usuarios el uso obligatorio de cubrebocas, esto con la finalidad de evitar la propagación del virus COVID19, sin embargo el día de hoy aún se observan usuarios que no portan los barbijos al momento de subir de las unidades.
El pasado 30 de julio el Gobernador del Estado Silvano Aureoles Cornejo emitió un decreto mediante el cual se obliga a todos los ciudadanos que transiten el uso obligatorio de cubrebocas, de no acatar las medidas las multas pueden llegar a los $2,580 pesos o hasta 36 horas de arresto.
En el crucero de salida Charo el día de hoy hay gente que accede sin mayor problema al transporte público con o sin el uso del cubrebocas, los choferes no le niegan el servicio a los usuarios y pueden transitar por la ciudad sin problemas.
Incluso se detentan choferes con los cubrebocas mal puestos, colgados de una oreja o de cubrepapadas, quienes reciben los pasajes y dan cambios sin ningún tipo de medidas sanitarias, hasta se observa que algunos de ellos se tocan el rostro a pesar del riesgo que su trabajo implica.
Elementos de la Policía Estatal de Tránsito trabajan en una campaña mediante la cual invitan a los usuarios del transporte público a portar cubrebocas, les indican el uso correcto del mismo, el cual debe cubrir desde la nariz hasta la barbilla.
“El programa que estamos realizando se hace en dos turnos, en este momento trabajamos doscientos elementos por turno en la ciudad para estar invitando a las personas a cumplir con las recomendaciones, en lo general es muy bien aceptado ya que al subirnos a las unidades las personas que no lo portaban sacan su cubrebocas y se lo ponen”, comenta Patricia, una policía que pertenece a esta brigada.
