STAFF/ Margarita Arreola @Arreolamargui
A pesar de la recomendación internacional de no salir de saca y menos viajar por la pandemia de coronavirus, los paisanos michoacanos que viven en Estados Unidos siguen llegando a sus lugares de origen por las vacaciones de Semana Santa.
José Luis Gutiérrez, secretario del migrante, comentó que, aunque si hay una disminución considerable de hasta un 50 % en comparación con el año pasado los migrantes siguen retornado a Michoacán en este periodo vacacional en medio de la contingencia del COVID-19.
El funcionario explicó que el estado que se vive es muy complicado porque los paisanos que están de visita no se quedan en su casa y eso puede ser riesgoso para un contagio del virus sobre todo las comunidades alejadas a donde llegan los migrantes.
«Si hay un riesgo, aun con los filtros que hay en los aeropuertos, el problema es que no se quedan en sus casas, pero nosotros trataremos de educarlos ante la contingencia través de los clubs migrantes», precisó en entrevista telefónica.
Agregó que no tiene un estimado de vuelos cancelados que, si hay sido varios, pero no ha sido limitante para que los migrantes lleguen por tierra.
El operativo de semana santa que implementó la secretaría el año pasado recibió a 40 mil visitantes y para 2020 se esperaban más, pero con la pandemia si han disminuido los viajes.
Por último, explicó que Michoacán es un estado binacional lo vuelve más peligroso el contacto con Estados Unidos porque la gente seguirá viajando entre los dos países a pesar de la crisis del COVID-19.
Pero la preocupación va más allá de la salud sino también se centra en las repercusiones económicas con las remesas parte esencial de la economía del estado, aunque aún no se pueden evaluar las pérdidas sin duda el dejar de recibirlas pegaría fuertemente en Michoacán ahondando más la crisis del coronavirus.
