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La Loma de Santa María y El Bosque de La Primavera

Por Paul Alcántar

  1. El túnel de la Loma de Santa María. Una vialidad para conectar a uno de los fraccionamientos más exclusivos de Morelia, Paseo Altozano, con la ciudad. Esta loma representa uno de los pulmones más importantes de la capital michoacana que lograba apaciguar el tráfico vehicular tan terrible que se genera por sus avenidas y sus estrechas calles del centro histórico.

Recuerdo que de chico mi padre me llevaba a Morelia y la recuerdo nublada. En mi memoria infantil siempre estará una ciudad con un clima frío  soportable y con veranos húmedos por las tormentas que caían al atardecer y provocaban una neblina espectacular en el bosque Cuauhtémoc, a un lado del acueducto de cantera rosa.

Si no fuera por la loma de Santa María tal vez nunca hubiera visto ese clima privilegiado que  tuvieron los morelianos. Hoy aquél clima privilegiado ya  no existe.  Hoy es amenazada por intereses económicos importantes, por conectar a quienes viven en la “exclusividad” a costa de un ecocidio anunciado. Terrible.

  1. El bosque de La Primavera y los incendios. Cada año lo mismo. El más grande de la zona metropolitana de Guadalajara una vez más es torturado por el hombre y su ambición. Todo indica que fue provocado –como suele suceder, como pasó en el cerro de la Cruz en Uruapan- para acabar con una reserva natural que está en un 85% en manos de particulares.

Acabar con sus árboles y fauna no importará si el objetivo es meramente económico. El gobierno federal no se ha atrevido a expropiar aquellas hectáreas para convertirlas en áreas naturales protegidas. El gobierno estatal no puede o no quiere comprar esos terrenos para que formen parte de un bien común, de un proyecto que beneficiará a largo plazo.

Han comprometido a los dueños para que reciban un subsidio para que respeten esos hermosos árboles que también han sido testigos de cómo desarrolladores se han apropiado del bosque para hacer “suburbios fresones”. Eso sí, que Guadalajara ya no huela a tierra mojada, que el ambiente siga aumentando su temperatura. Que en el verano sigamos llegando a los 39 grados.

El daño ya es más que terrible. El 10% de este maravilloso bosque ha sido ya destruido por sus llamas.

El domingo pasado fue el día de la Tierra. Curiosamente Morelia y Guadalajara  han sido noticia en las últimas semanas en hechos que tienen que ver con el actuar del ser humano.  El gran conflicto de Cherán comenzó con lo mismo; sus bosques ya no están por culpa de los talamontes. Antes, dicen, caía nieve en Cheranatzicuirin desde noviembre y se veía el cerro del águila de Paracho blanco por las mismas fechas.  Hoy sólo fotografías quedan.

Nos estamos acabando nuestro planeta. No hay qué preocuparnos por el deshielo de la lejana Patagonia, sólo ya no te chingues lo que tienes en frente. Respetemos lo que nos rodea.

Chapulines

1.- Y sí importa lo que pasa en Guadalajara, Morelia y Cherán. En el último caso hay sangre de gente que luchó por preservar los pocos árboles que han quedado. Pero no nos importa.

2.- Peña Nieto no quiere debatir. Los Amloístas se indignan y los panistas también. Carmen Aristegui recibió un rotundo NO GRACIAS a su invitación. Es normal que siendo el puntero no quiera bajarse de su nube para arriesgarse ante contrincantes sedientos de hacer al puntero papilla. Pero que le bajen, el Peje no fue al primer debate hace seis años  y ¡vaya que le costó!

Twitter: @paulalcantar

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