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“…Y tragedias que van pasando”

-En los caminos de Michoacán-

Por Elly Castillo

El debate presidencial se me había  atravesado el domingo pasado para no hablar lo suficiente, con el espacio y la reflexión que se merece, del asesinato de Yami y Chepe, los dos niños de cuatro años robados de las puertas de sus casas desde el 11 y 27 de mayo pasados.

Impactado por saber que en Morelia, esta ciudad que en días normales aparenta la calma de un rancho setentero, vive alguien, viven algunos, capaces de asesinar a dos niños, esperaba redactar una reflexión profunda, algo a la altura del Réquiem de Mozart para traducir el dolor de una comunidad, Tenencia Morelos, que se siente violada en su intimidad más profunda: el miedo de saber que el asesino “duerme entre nosotros”.

Hoy sin embargo las tragedias se amontonan, y no vamos llorando a unos, llegan otros. Lamentablemente ayer en Uruapan un camión de servicio público que transportaba a niños del kínder Juan Escutia quienes se dirigían a un criadero de cocodrilos en El Sabino como actividad recreacional.

Todo apunta a que el chofer se quedó sin frenos, y que la unidad ya estaba lo suficiente gastada como para seguir andando.

Entre cifras mentidas, desmentidas, cambiantes de parte de la Procuraduría de Justicia del estado, se pudo saber, después de al menos ocho horas de la tragedia, que murieron dos niños de cinco años y nueve adultos, más otras treinta personas lesionadas.

Detrás de los dos casos hay una cuestión en común: negligencia de las autoridades. Alguien en el gobierno de Michoacán (no sólo de ahorita), sino de al menos hace dos administraciones atrás, no ha estado haciendo su trabajo.

Lamentablemente las tragedias los encueran, los denudan como son: incompetentes.

Cosas que ahí están pero que a nadie le interesan: La elección de Morelia.

Truchas: Los papás de Chepe y Yami marcharon ayer para pedirle, a los diputados, que aboguen por ellos para que les den respuestas en la sabri Procu de Michoacán, que no puede resolver sólo una. A buen santo se encomendaron los desesperados padres, yendo con diputados faltistas según lo indican sus registros de asistencia.

Twitter es la movida morr@s: @ellycastillo

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