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Diario De Un Foráneo – Adiós Amor, Me Voy De Ti/Renuncias Universitarias

A mi familia changoonguera…

By: Mariano Bolaños Montañez

Lo sé, ya parezco el servicio de agua potable en Morelia: a veces estoy, a veces no; a veces me voy y a veces regreso… Así que antes que nada te pido me perdones, estimado lector, por estas inconsistencias más notorias que las de finanzas del gobierno.

Seguido de estas disculpas, arrancamos con el tema del día de hoy; y es que una vez más vamos a sincerarnos como sólo nosotros sabemos hacerlo, y vamos a platicar aquí cerquita, en confianza, al oído, de cómo en ciertas etapas de esta cochinada llamada ‘vida adulta’, tenemos que hacer renuncias y decir ‘adiós’, ‘ciao’, ‘hasta la vista’, ‘bais’, a cosas que queremos o que se nos hacen muy difícil soltar.

A lo largo de tu vida universitaria te vas a topar con un jodo de elecciones por hacer, más que las que tendrá México en el 2021, y en varias ocasiones toda esa maraña de probabilidades y posibilidades se tendrá que reducir a una sola decisión y muchas renuncias… Yeap, eso está más difícil que el Álgebra de Baldor.

Por ejemplo: si eres de esos seres afortunados, iluminados por la vida, seleccionados de Dios, tendrás que escoger el horario y las materias que deberás tomar durante tu semestre; sería conveniente que consideraras qué tanta carga de trabajo puedes soportar y contrastarla con el provecho que le sacarías a cada asignatura.

A final de cuentas, uno de los objetivos de estudiar una carrera es salir lo más preparado posible del área en la que decidas especializarte, y de nada sirve que tomes 15 materias al mismo tiempo si no vas a aprender la gran cosa… Pero tampoco te conviene tomar 2 clases por semestre y terminar la carrera en 10 años.

También, hay algunas universidades, licenciaturas y/o ingenierías en las que en cierto momento debes determinar algún área terminal para tu carrera; fácil la cosa cuando únicamente tienes dos opciones, pero algunos colegas que parece que su vida es un ‘2020 eterno’, tienen incluso más de 6 caminos posibles.

Y mucho ojo, que esa será una decisión igual de importante como la que tomaste el día en el que elegiste qué carrera estudiar; te sugiero que pienses en ti y en lo que quieres a futuro, toma en cuenta los consejos de profesores, pues son quienes más experiencia tienen en el área y quienes mejor te podrían asesorar.

Por si fuera poco, hay una cosa tormentosa en el mundo llamada ‘TESIS’, en la que tienes la misma cantidad de temas posibles para abordar que las estrellas en el cielo, los cabellos en el cuerpo de Chewbacca o las veces que el Peje ha dicho que va a ‘acabar con la corrupjión’.

En cualquiera de las situaciones anteriores, deberás decirle adiós ‘tenkiu nets’ a una o más de las opciones que tengas a la mano, y te adelanto que muy probablemente algunas de ellas las hagas sin estar completamente convencido… Así es la vida universitaria.

Pero he aquí la gran moraleja de toda esta letanía anterior: las elecciones que tomes, buenas o malas, las tienes que aprovechar al 100… Has que valga la pena las renuncias que hiciste, y sácale el máximo provecho a las opciones que elegiste.

Si algo nos ha enseñado este año y la pandemia del COVID-19, es que nunca vamos a tener certezas de nada. Si consideras que alguna de las renuncias que haces (por decisión propia o por eliminación después de un ‘de tín marín’) no fue tu mejor jugada, ni hablar, te toca tomar al toro por los cuernos… Y quién sabe, quizás en un futuro, descubres que a final de cuentas sí era la mejor opción para ti.

Así que amiga mía, amigo mío, herman@ estudihambre, no eches en saco roto todos los sacrificios que haces, todas las elecciones que tomas, todos los aciertos que tienes y todas las k-gadas que cometes… Da siempre el 300%, que a final de cuentas, verás cómo todo vale la pena.

P.D… Cuando la vida te golpeé y te deje tirad@ en el suelo (y únicamente en esa situación), levántate, sacúdete y pon la cara de esta niña:

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