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Un padre y su hija, migrantes originarios de El Salvador, fallecieron ahogados en el Río Bravo cuando intentaban cruzar desde Matamoros a Brownsville, Texas.
Óscar Alberto Martínez Ramírez y su hija Valeria, de un año y 11 meses de edad estaban esperando realizar la solicitud de asilo en Estados Unidos, pero el domingo pasado se cansaron de esperar y en compañía de Tania, esposa de Óscar y madre de la pequeña, decidieron emprender su camino y tratar de cruzar la frontera.
Al intentar cruzar el río, Óscar y Valeria fueron arrastrados por la corriente, una Tania pue rescatada por una persona y después pidió la ayuda de Policías Estatales y personal de la Marina Armada de México, quienes laboraron hasta 12 horas en búsqueda de ambas personas.
Sin embargo, fue hasta la mañana de este lunes que el equipo de rescate encontró los cuerpos de ambos migrantes a un kilómetro de distancia del Puente Internacional; Valeria se sujetaba del cuello de su padre y quedó cubierta con la playera de color negro que vestía Óscar.
Otra de esas imágenes que especialistas consideran representativa de la política de criminalización de los migrantes por parte del gobierno estadounidense. Un salvadoreño y su hija de un año 11 meses… Foto: EFE/ Abraham Pineda-Jácome pic.twitter.com/vRUkT8jlSh
— Juan Carlos Romero (@jcromero) 25 de junio de 2019
A finales del mes de mayo, el albergue ubicado en Puerta México contabiliza al menos 2 mil solicitudes de asilo de migrantes nicaragüenses, cubanos, brasileños, salvadoreños y africanos para conseguir ser recibidos en Estados Unidos.
