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Luego que hace dos días fue encontrado el cuerpo sin vida de la activista y defensora de los bosques de Cherán, Guadalupe Campanur Tapia, de 32 años de edad, tras dos semanas de estar reportada como desaparecida de la comunidad, familiares, amigos, y compañeros de causa reclaman justicia.
El pasado 16 de enero, la Procuraduría General de Justicia de Michoacán informó que el cuerpo de Campanur, de 32 años de edad, se ubicó a las afueras de Chilchota en el entronque rumbo a Zamora, cerca de Tanaco , en un predio denominado Irapio; sin embargo debido a las condiciones de descomposición del cadáver al momento de su localización no fue posible determinar las causas de su muerte.
Desde el 2011 Campanur Tapia se involucró en el movimiento por salvaguardar los bosques y la seguridad en Cherán desde 2011. También participó en la creación de la ronda comunitaria y cuerpo de guardabosques de dicha localidad indígena, la única que ha expulsado a los partidos políticos para regirse por usos y costumbres.
La víctima además era una de las mujeres purhépechas que inició el movimiento contra los talamontes en Cherán, y de las pocas que continuó en la estructura de autogobierno desde ahí, según se constata en el libro «Guardianes del territorio», narrado por la periodista Alejandra Guillén.
En redes sociales ha comenzado a surgir manifestaciones en exigencia a las autoridades para resuelvan el caso pidiendo no se cree indiferencia por el caso debido a su género.
“Fue un feminicidio que, además, se representa una vulneración comunitaria estratégica, al ser ella una de las comuneras activas más añejas y constantes. Lupita fue nuestra compañera y participante del proyecto «Conociendo y reconociendo el territorio Cherán K éri», lamentó la diputada local del PT, Brenda Fraga a través de su perfil de Facebook, entre otras voces que han comenzado a levantar la voz en torno al caso.
