Chido, rico y barato
Por SANDee
Hace un par de semanas por fin se terminó una restricción de casi 20 años que los güeros del norte habían promovido en contra del atún mexicano. La Organización Mundial de Comercio finalmente determinó que era injusto que las latas tuvieran la etiqueta de “dolphin safe”, (que no se afectó a los delfines en la captura del atún).
México les demostró a los gabachos que nuestras flotas atuneras reúnen todos los requisitos del Acuerdo sobre el Programa Internacional para la Conservación de los Delfines y hasta es reconocido por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura. (EL UNIVERSAL).
Suck those gringos!
Y mientras el atún mexicano se coloca en el mercado internacional, vamos a comenzar por consumirlo nosotros para apoyar a las 10 mil personas que obtienen su ingreso de esa industria, entre pescadores, personal de fábrica y distribuidores.
Por tan sólo 9 pesos (costo promedio por lata, según la marca), obtienes un alimento muy nutritivo y fácil de preparar. Chido, chido, ¡chido!
En una latita hay más proteínas que en un bistec y 6 veces menos grasa, vitaminas A y D (para el sistema inmunológico), fósforo (favorece el metabolismo), potasio (regenerador celular), magnesio (nutre el sistema nervioso), hierro (fortalece la sangre).
Y por si fuera poco: ácidos grasos Omegas 3 y 6 que previenen enfermedades cardiovasculares y fortalecen el cerebro. (Nutrición.pro) ¿Cómo ves? Especialmente para los estudiantes que viven solos, esta es una alternativa de 10 para sobrevivir con poco dinero sin padecer hambre.
Mientras lo consumas en agua, -en lugar de aceite-, puedes comer atún en todas sus formas hasta 3 veces a la semana (por la cantidad de proteína que contiene); mejor que comer garnachas fritas que te llenan, pero no te nutren y sí engordan.
El atún en cambio, es uno de los alimentos que los nutriólogos recomiendan en sus dietas a los deportistas y a la gente que quiere regular su peso, la clave está en la manera de prepararlo, (de preferencia sin mayonesa), mejor a la mexicana, con tantas verduras como gustes, así “crece” la ración.
Otro beneficio es que no se echa a perder, puedes comprar y almacenar latas para consumirlas cuando te parezca, -pero siempre ten en cuenta la fecha de caducidad-.
¿Vas al súper y no sabes de cuál comprar? ¡No hay pex! La PROFECO te da un “norte” para saber qué buscar, échale un ojo:
Twitter: @SanDeeMolina
Facebook.com/ColumnaChangoonga
Changoonga.com no necesariamente adopta como suyos los choros, chorizos, morongas y chistorras publicados en ella y deja en sus respectivos padres (autores) la responsabilidad de todas las barrabasadas y debrayes que aquí plasman, producto de las ardillas hiperactivas que habitan en sus macetas. Si te gusta, ¡comparte y dale “like”!
