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Calderón No Teme Ir Ante Corte Internacional Una Vez Que Deje Los Pinos

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El aún presidente de esto que se llama México, Felipe Calderón, asevero muy machin que  él no tiene temor de ser llevado a la Corte Penal Internacional de La Haya, por violaciones a los derechos humanos en la lucha contra el narco.

Entrevistado  para el periódico El País, el mandatario de Mexicalpan de las Tunas manifestó que la violencia es un fenómeno nuevo de la última década.

«No es algo que se genere por la acción del gobierno; pero puedo asegurar que encontré instituciones verdaderamente podridas en los ámbitos federal, estatal y municipal. Al menos hoy las instituciones federales con sus deficiencias están mejor».

Calderón admitió que la violencia creció de manera dramática desde 2004 y llegó a un punto climático en 2011, por lo que dijo no temer ser llevado a la Corte Penal Internacional de La Haya, por violaciones a los derechos humanos en la lucha contra el narco.

Ante lo cual se le refirió que el ex presidente Vicente Fox asegura que hubo muchas violaciones, a lo que respondió: «Pues si tiene constancia de ellas, debería ir a la auturidades correspondientes»

Aseguró que la violencia ha decrecido después de llegar a un punto climático en el 2011. «Los homicidios violentos decrecieron entre enero y junio de este año de entre 15 y 20% menor que en el mismo período del año anterior».

Sobre las elecciones pasadas, Jelipillo aseguró que “no hay absolutamente” ningún pacto con el PRI. «No hay nada de eso. Mi pacto es con la Constitución y con la democracia», negó.

«Como panista, perdimos todos. Perdimos los panistas que estamos en el gobierno al no refrendar en votos el apoyo que podemos tener por nuestra actuación; perdió la dirección panista porque el proceso de selección de candidatos fue errático, tortuoso, costoso políticamente».

Tras lo cual consideró que la asignatura pendiente de la democracia es que no haya sospecha en la compra de votos. «Si lo es. El problema no está en la contabilidad electoral sino en la libertad con la que un elector llega a la casilla para votar. Y ese desafío sigue presente».

 ¿Es un fraude?

«Es algo que tiene que corregirse y castigarse. Si hay votos comprados, se anula la voluntad de esos votantes; pero que esos votos sean nulos no necesariamente implica la nulidad de un proceso electoral en el que han votado 70 millones de personas«.

 

 

 

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