STAFF/ Marina Alejandra Martínez
Las advertencias del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre la imposición de aranceles a México han comenzado a generar efectos negativos en la economía local, particularmente en el comercio del centro histórico de Morelia.
De acuerdo con el presidente de la Asociación de Comerciantes y Vecinos del Centro Histórico de Morelia (COVECHI), Alfonso Guerrero Guadarrama, las ventas han caído entre un 7 y un 10 por ciento desde que se hicieron públicas dichas amenazas.
El líder comercial explicó que la disminución se ha hecho evidente en el consumo de los morelianos, afectando los ingresos diarios del sector, que oscilan entre los 13.5 y 14 millones de pesos, y que a nivel mensual pueden superar los 350 millones de pesos.
Guerrero Guadarrama atribuyó esta baja no solo al temor que genera la imposición de aranceles, sino también a la reducción en el envío de remesas.
«Simplemente, lo estamos viendo con la disminución de las remesas, no he escuchado una cifra oficial, pero nos hemos dado cuenta de que la gente que normalmente venía y traía dinero para comprar, porque había recibido remesas ya no están acudiendo, porque sus familiares en Estados Unidos está afectada en su economía porque no están trabajando y están empezando a guardar los recursos por la falta de ingresos, nosotros estamos seguros de que están dejando de llegar remesas y eso está afectando la economía», lamentó.
Señaló que muchos migrantes en Estados Unidos han optado por no salir a trabajar ante el riesgo de ser detenidos y deportados, lo que impacta directamente en la cantidad de dinero que envían a sus familias en México.
En particular, el representante de COVECHI destacó que en California, numerosos mexicanos han dejado de laborar en sectores como el campo, supermercados y tiendas de conveniencia debido al miedo a ser capturados por autoridades migratorias.
Esta situación, dijo, inevitablemente repercute en la economía de sus familias y, por extensión, en el comercio local.
Guerrero Guadarrama enfatizó que esta crisis genera una profunda incertidumbre entre la comunidad migrante, lo que podría agravar aún más la situación económica en los próximos meses.
