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Con pancartas, veladoras, fotografías, rabia, indignación, una piñata la cual acabo siendo vapuleada y quemada, es como un grupo de alrededor de 50 mujeres feministas, celebraron la pena máxima de 59 años de prisión en contra de Diego Urik Mañón Melgoza, quién fue responsable por el feminicidio de Jessica Gonzalez Villaseñor.
La concentración, que prometió y cumplió ser pacífica, duró alrededor de una hora, dónde las chicas comenzaban a llegar con carteles y veladoras, en alusión al luto por la joven maestra, asesinada el pasado 21 de septiembre del 2020, en Altozano, Morelia.
El punto emotivo se dio, cuando la familia de la víctima llegó con una piñata, en la que se colocó el rostro, y nombre completo del Feminicida, y al ritmo de «Ya cayó, ya cayó, Pinche Diego ya cayó» se le daban tres golpes por persona, para poder hacer un circuito organizado.
Al respecto, Cristo González Villaseñor, hermano de la joven, aseguró que la pena de 50 años, era lo mínimo que se podía otorgar tras las más de 100 pruebas ofertadas, y luego de que su familia no hubiera quitado el dedo del renglón durante todo el proceso.
«Pues es un reflejo completo de lo que pasa cuando te acercas con todas las instituciones que deberían de apoyarte y de socorrer por tus derechos humanos» apuntó el joven.
Es de mencionar, que elementos de Policía Municipal prometieron custodiar la concentración de la noche de este viernes, realizando todo lo contrario, pues ninguno de los dos carriles de la avenida Madero fue cerrado, además de que solo se observaba pasar al rededor algunas patrullas, aunque ninguna se acercó a dialogar con las feministas.
