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Pasa En CDMX: Discriminan A Reconocida Artesana Por Vestimenta Indígena Y La Acusan De Ambulante

STAFF/@michangoonga

El pasado 27 de octubre, Yatahli Otilia Rosas Sandoval, originaria de Oaxaca y ganadora del Concurso Gran Premio Nacional de Arte Popular 2022, se dirigía a recibir su premio en el Museo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, ubicado en el centro de la Ciudad de México, cuando un elemento de la Policía le impidió el paso, argumentando que era vendedora ambulante.

La artesana se encontraba acompañada de su hermana, quien registró el acto discriminatorio en video. En el clip se observa como el oficial que se identificó como Miranda Román, les está bloqueando el paso insistiendo que no pueden seguir porque “van a vender” y les pide que le muestren lo que llevan en las bolsas.

Las dos mujeres Triquis cuestionan al policía si es por su apariencia que se les impide el paso, a lo que el oficial responde:

“A lo que me refiero es que siempre los que venden, vienen vestidos así” señalando la indumentaria de las mujeres oaxaqueñas, que es la tradicional de San Andrés Chicahuaxtla, comunidad de Oaxaca de la Triqui Alta, perteneciente al municipio de Putla de Guerrero.

Momentos después, se acerca una oficial que se negó a identificarse y les sugiere que en futuras ocasiones, pidieran un pase para poder transitar de manera libre y no fueran detenidas, a lo que las hermanas cuestionan por qué tendrían que hacer eso; la oficial responde: “porque luego cierran”, aludiendo a las protestas que han realizado para denunciar violaciones a los derechos humanos.

Ante estos hechos claramente discriminatorios, Yatahli Rosas realizó una denuncia ante el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (CONAPRED). En la denuncia expresa, referente a su indumentaria tradicional, que:

”Ahora tenemos miedo de portarlo e incluso de decir a qué etnia pertenecemos, ya que eso significa que pueden violar nuestros derechos constitucionales”.

La artesana oaxaqueña agrega:

“Confirmamos que como mujeres seguimos siendo víctimas de discriminación y racismo por parte de la seguridad pública, debido a que, en lugar de brindarnos confianza por ser los encargados de preservar y proteger el orden público, la integridad personal y los bienes de toda la población, ahora nos tenemos que cuidar de ellos”.

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