#Denúnciamesta a mi hermana la desapareció su ‘ex’ pidió ayuda denunció y autoridades la ignoraron
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La hermana de Patricia Paniagua señaló que en muchas ocasiones “Paty” denunció la violencia tanto física como psicológica por parte de su expareja, sin embargo, las autoridades no le hicieron caso y hoy ella se encuentra desaparecida.
“Buenas tardes a todas y a todos, muchas gracias por atender a nuestro llamado y acompañarnos este día. Mi nombre es Yesica Paniagua y hoy estoy aquí para hablar por mi hermana Patricia Paniagua, a quién a dos años de su desaparición seguimos buscando, hoy le pido a la sociedad su ayuda para encontrarla.
Patty es mamá de tres niños, hermana, hija y amiga y hoy toda una familia sufre su ausencia. En diversas ocasiones Patty denunció ante las autoridades las situaciones de violencia física y psicológica que sufría por parte de su expareja y padre de sus hijos y sin embargo se encontró con el muro de la apatía y la ignorancia. Las agresiones de las que fue víctima previo a su desaparición alcanzaron un nivel innombrable pues en una ocasión incluso la enterró viva y pese a todo esto el estado no garantizó su integridad y vida.
El 31 de mayo del 2020 Patty salió a trabajar y nunca regresó. La persona con quien fue vista por última vez es su ex pareja y agresor José Ventura y pese a las múltiples evidencias que lo señalan como responsable de la desaparición de mi hermana el día de hoy está libre ya que en primera instancia fue absuelto, pues en palabras de la juez Ana Lilia García Cardona hubo una deficiente investigación por parte de la Fiscalía, no se agotaron todas las líneas de investigación, hubo una deficiencia en el desfile de los órganos de prueba así como un pésimo y deficiente desempeño de la ministerio público durante el juicio.
Hoy estoy aquí siendo la voz de mi hermana que exige justicia, hoy soy la voz de mi mamá que está en un refugio con mis sobrinos, los hijos de Patty, pues durante todo el proceso hemos sido víctimas de amenazas por parte de José y su familia y tememos por nuestra integridad, por lo que hago responsable de lo que nos pueda llegar a pasar, no sólo a José Ventura si no a la jueza Ana Lilia, a la Fiscalía de Personas Desaparecidas, a la CEEAV y a todas las autoridades que ante nuestros gritos de justicia han hecho oídos sordos.
Las leyes y las autoridades deberían garantizar justicia a las víctimas y protección a las víctimas indirectas, y por el contrario, nosotras nos hemos convertido en la prueba viviente de como el estado nos falla a las mujeres. A Paty le falló la justicia dejando al responsable de su desaparición en libertad, ignorando el peligro que eso representa para sus hijos y familia, pero también le fallaron las autoridades cuando quiso denunciarlo por violencia familiar y no fue atendida correctamente y le siguen fallando ahora cuando deberían velar por sus hijos y por justicia pronta y expedita y prefieren quedarse de brazos cruzados, la Fiscalía se presenta a la audiencia para prácticamente ser testigos pues su única aportación fue decir que yo no tengo la calidad de “victima indirecta”. ¿Cómo no voy a serlo si desde hace dos años estoy buscando a mi hermana? Si desde hace dos años yo cuido a sus hijos y les doy respuestas cuando llorando preguntan por su mamá. En los casos de desaparición no solo son víctimas los hijos o los padres, somos víctimas toda la familia, todos la extrañamos y sufrimos, pero si nos vamos aun mas dentro, somos victimas toda la sociedad, pues una sola persona desparecida es prueba de un estado fallido.
El proceso estuvo plagado de inconsistencias, pero no sólo eso, estuvo lleno de hecho que nos revictimizaron desde la ministerio publico diciéndome que si acaso yo estaba a favor del agresor para justificar el pésimo trabajo que hizo preparándome para la prueba testimonial, hasta los agentes de investigación pidiéndome dinero para hacer SU trabajo.
A casi dos años de la desaparición de mi hermana seguimos sin tener pistas de su paradero, ¿de qué nos sirve entonces tener una fiscalía especializada en desaparición de personas? ¿de qué sirve que en el estado tengamos una comisión de búsqueda de personas? ¿De qué sirve todo el presupuesto que se les asigna, si las personas no están capacitadas? Y que digo capacitadas, no tienen ni siquiera empatía y voluntad.
Hoy nos manifestamos ejerciendo nuestro derecho a la protesta y como ya había pasado antes el poder judicial nos cerró sus puertas, en una ocasión dejándonos encerradas dentro y en esta ocasión impidiéndonos la entrada, marché exigiendo justicia el 8 de marzo y lo que recibí fue gas lacrimógeno por parte del estado, pido justicia pronta y expedita pero las leyes están mal hechas y a las víctimas nos dejan en un segundo plano. Poder ejecutivo, judicial y legislativo todos son lo mismo, todos son cómplices de este estado feminicida y parte de un problema estructural que nomas no pueden resolver.
Le pido al magistrado Juan Salvador Alonso Mejía que no ignore los derechos de mis sobrinos, de mis padres, de mi familia y de Patty, que no nos obstaculice la oportunidad de saber el paradero de nuestra hermana, hija y mamá con un mal veredicto, que haga justicia para mi hermana Patty Paniagua y no sea cómplice del sistema patriarcal que nos arrebató a mi hermana. Magistrado, nuestra esperanza está con usted, confiamos en su buen juicio.”
