STAFF/ Eliza Flores @eliz_ffp
«Se sanciona como penalmente responsable a 40 años de prisión», se escuchó en la sala número 7 de los Juzgados Penales de Morelia, la pena es para Francisco Ignacio «N», a quien se le encontró culpable por haber cometido feminicidio contra su esposa Gabriela Pérez, de un corte en la yugular, 29 puñaladas y 20 cortes más con un cuchillo en diferentes partes del cuerpo, el feminicida la atacó y mató en su lugar de trabajo, un pequeño restaurante llamado «Mil Amoles», en la Avenida Camelinas, el pasado 9 de julio del 2019.
La sentencia llegó después de un receso de más de media hora. En presencia de los padres de Gabriela Pérez, los padres de Jessica González Villaseñor, la hermana de María Guadalupe del Toro y prensa, se dictó sentencia, tomando en consideración los últimos alegatos de la Fiscalía General del Estado de Michoacán, los jueces presididos por María Soledad López Ortiz, estimaron que los alegatos de la Fiscalía no estuvieron completamente fundamentados, por lo que no dictaron la pena de 50 años. La única agravante que tomaron en cuenta fue el daño que se causó a la hija de Gaby.
Durante la audiencia se pidió la pena máxima de 50 años y la reparación del daño, equivalente a 162 días de salario mínimo, lo que se traduce a la cantidad de 519 mil 560 pesos, los cuales en teoría Francisco debe de pagar a las víctimas indirectas, en este caso los padres y la hija de Gaby, como le decía de cariño su familia, está reparación del daño también es parte de la sentencia integral que recibirá la familia, así como un tratamiento psicológico para las víctimas indirectas.
En el lapso del receso que tomaron los jueces para determinar los años de sentencia, el colectivo feminista MAPAS cerró la vialidad de la Avenida la Huerta y con ayuda de un megáfono se hicieron presentes en la sala 7, ya que hasta el segundo piso de los juzgados se escucharon sus exigencias de justicia.
En los alegatos únicos la FGE resaltó siete circunstancias para solicitar la pena máxima, entre estas agravantes se mencionó que los actos del feminicida fueron con dolo y extrema violencia, que tuvo dominio de todos sus actos incluso previos a matarla, ya que la vigiló y atacó en ausencia de testigos, e incluso intentó ocultar los hechos.
El vínculo que existía entre la víctima y feminicida, también se destacó como una de las agravantes del feminicidio, la edad de Gaby, quien tenía solo 27 años, el hecho de que tuvieran una hija, y que el asesinato que cometió su padre es un acto que trascenderá en la vida de la menor y afectará su desarrollo.
Y no menos importante las condiciones físicas de Francisco frente a Gaby, ya que el asesino es de una complexión robusta, con una superioridad física que le dio ventaja sobre Gaby, quien era delgada, de estatura baja y que se encontraba desarmada, esto último señalado como una situación de desventaja, y que a pesar de que Gaby intentó defenderse no pudo salvar su vida.
Padres de Gaby Exigen Pena Máxima
Al final de los alegatos presentados tanto por la Fiscalía y la defensa, los padres de Gaby pidieron a los jueces que sentenciaran a Francisco con la pena máxima.
«Sus señorías yo les pido la pena máxima por el daño ocasionado a mi nieta y a nuestra familia, es todo», dijo la señora Gabriela Ayala en el micrófono, quien estuvo acompañada de su esposo en todo momento.
Por su parte el señor Félix Pérez recalcó que el daño que se causó con el feminicidio de su hija debe ser castigado con la máxima sentencia, calificó de «desastroso todo el daño que se causó a su familia y a la familia de Francisco».
Esto sucedió después de que el abogado defensor del acusado desestimara los alegatos del Ministerio Público, alegando que no existían las pruebas para acreditar las circunstancias señaladas en párrafos anteriores, por lo que pidió la pena mínima para su cliente.
