STAFF/Alejandra Hernández-@AleSolAleLuna
En Michoacán, 40% de las escuelas de nivel básico y medio no cuentan con lo básico para el regreso a clases presenciales, ya que este porcentaje no cuenta con agua potable para que mínimo los niños y niñas, así como jóvenes y docentes, se laven las manos de manera constante y romper cadenas de contagio contra el COVID.
Este regreso hibrido, paulatino o escalonado al próximo ciclo escolar en agosto, se vuelve cada vez más complejo por la falta de certeza en insumos para evitar cadenas de contagio, así lo manifestó el secretario general de la Sección XVIII de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
«Nosotros decíamos que deben existir las condiciones mínimas necesarias para el regreso a clases, sin embargo, no podemos regresar en 40% de las escuelas porque en estas no hay agua potable, lo que dificulta el regreso», confesó en entrevista.
Además, acusó que no ven un avance en el programa estatal de entrega de insumos, los cuales, acusaron que fueron repartidos con fines políticos por parte de la Secretaría de Educación del Estado (SEE) en las pasadas elecciones.
«Antes de las elecciones, observamos los almacenes de la Secretaría de Educación llenos de los insumos, pero tenemos conocimiento de que fueron repartidos con tintes de carácter político», acusó.
El regreso a clases presenciales cada día se ve más y más lejano tras pasar de semáforo verde a amarillo hace menos de una semana, cuya tercera ola asoma sus nuevos contagios, sin contar con la presencia de las variantes Delta, Alfa y Gama en cinco municipios de Michoacán.
Pese a todo eso, las autoridades federales y el gobernador electo en la entidad, Alfredo Ramírez Bedolla, se pronunciaron a favor del regreso presencial, aunque escalonado, a las aulas, sin embargo, las condiciones para llevarlo a cabo se han dejado entrever riesgosas ante la pandemia.
