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Jacob, un menor de 7 años de edad que se comió un pan envenenado en Veracruz, pronto será dado de alta.
Sin embargo, su hermanita, de 5 años de edad, no corrió con la misma suerte, ya que ella falleció tras ingerir el pan que alguien había aventado al jardín de los menores para que los perros se lo comiera.
El secretario de Salud estatal, Roberto Ramos Alor, informó que visitó al niño este 29 de junio en el hospital como pediatra neumólogo y aseguró que pronto será dado de alta.
“Familia veracruzana, quiero informarles que Jacobo va evolucionando favorablemente; hoy estuve como pediatra neumólogo pasándole visita médica, dentro de unos días más podrá volver a su natal San Antonio en Soteapan”
La madre del menor se dijo agradecida con el personal médico por salvar la vida de su pequeño.
