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Fuego amigo en el IMAIP // By Camila Cienfuegos

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Por Camila Cienfuegos (Alebrije)

Pueblo chico, infierno grande, es en lo que se ha convertido el Instituto Michoacano de Transparencia, que nuevamente se pone en la escena por escándalos internos.

Recientemente llevaron a cabo jornadas de transparencia en las que se evalúa a todas las instituciones de gobierno cuando uno de sus dos consejeros, Daniel Chávez, desestimó sorpresivamente algunos resultados, uno de ellos, el del municipio de Zamora, además de presumir que su propio partido, el PAN, que está en poder de un grupo contrario al suyo: los markistas, ha sido junto con MORENA, de los institutos con más recursos de revisión
Pero también el cocoísta parece meterle jiribilla al tema de los legisladores de su partido, Marko Cortés y Carlos Quintana, que insinúa, han hecho mal uso de los datos personales mediante encuestas: “los ciudadanos que se sientan vulnerados pueden presentar su queja directamente ante el INAI, vía internet”, dice el funcionario en plan desestimador. En lo que respecta a Quintana tendría que ser ante el IMAIP ¿no? o Daniel Chávez sólo quiere aventar la piedra y ¿esconder la mano?

Daniel Chávez está llevando de manera peligrosa y más allá de lo legal sus funciones de consejero del IMAIP, dándole el toque político-partidista por encima de sus obligaciones como funcionario del Instituto de Transparencia. No es primera vez que lo hace. Le apetece presidir el changarro.

El denostar el resultado de las verificaciones realizadas por el IMAIP, deja entre ver el caprichoso desinterés de Chávez por fortalecer la transparencia en el estado, pues la fecha, la hora y el día de las evaluaciones de transparencia de las diversas autoridades michoacanas, se dieron a conocer para que cualquier ciudadano interesado las pudiera presenciar, entre ellos Daniel Chávez, quién no asistió ni mucho menos quiso colaborar en el procedimiento de dichas verificaciones. Es pues otro de los que quieren brincar más arriba pisoteando la chamba de abajo.
Con estos actos se comprende por qué nadie se toma en serio al IMAIP.

CAMPAÑA PARA MÍ
He tenido la desdicha de presenciar los promocionales de los diputados del PAN Marko Cortés, Andrea Villanueva y Carlos Quintana, así como de Marco Polo Aguirre del PRI. Al analizarlos por un momento me pregunto ¿entonces para qué carajos queremos a los gobiernos estatal y municipales? Porque si estos legisladores hacen lo que presumen, bastaría su chamba para solucionarlo todo.

La realidad es que son campañas mediáticas en las cuales todo gira en torno a ellos, a su figura, a un 95 por ciento de buenas intenciones y “gestiones”, ante un cinco por ciento de posible chamba legislativa real.
Al observar con detenimiento, se aprecia que dicha propaganda está destinada no para informar labores legislativas, sino para encaminarlos hacia la reelección o el siguiente cargo de elección popular.

La presunción de su quehacer político raya en lo populacheramente grotesco, en enaltecer su propia figura de la mano de datos apantallabobos. Ya no sé si rinden cuentas o piden el voto.
Pero los casos más escandalosos han sido los de Marko Cortés y, recientemente de Carlos Quintana, que insisten en hacer propaganda con el uso de encuestas truqueadas, presumiblemente violentando la protección de datos personales.

Me parece un gasto mediático absurdo e innecesario cuyo monto, nunca jamás sabremos.

 

¡Excelente viernes tequilero para todoooooooooooos!

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