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Blanca Arellano Gutiérrez, una mujer mexicana de 55 años de edad, conoció a través de redes sociales a Juan Pablo Villafuerte, un hombre peruano de 37 años, estudiante de medicina, con quien entabló una relación a larga distancia. El amor llevó a la mexicana a viajar en el mes de julio a Perú para conocerlo en persona. Pero su sueño de vivir una historia de amor en el país sudamericano se convirtió en tragedia.
Desde el pasado 7 de noviembre, Blanca dejó de responder mensajes y de tener cualquier tipo de comunicación con su familia en México, lo que alertó a sus parientes, pues la mexicana siempre se mantenía en contacto y señalaron a Juan Pablo Villafuerte como responsable de su desaparición, por lo que solicitaron la intervención de la embajada de México en Perú.
El temor y las sospechas de la familia incrementaron luego de que fue comunicado que el 10 de noviembre un grupo de pescadores que realizaban su labor en la bahía de Huacho, Perú, encontraron un cuerpo mutilado de mujer. La bahía no se encuentra muy lejos del hogar del estudiante peruano, donde Blanca habría estado viviendo.
La policía cateó la casa de Juan Pablo, en donde se encontraron pertenencias de Blanca, además de una bandera de México, cabellos de mujer y manchas de sangre en una de las habitaciones. Por esto, fue ordenada la detención preliminar de Villafuerte para ser investigado.
El cadáver mutilado encontrado en la playa de Huacho, tenía las rotas las costillas y no contenía órganos vitales. El cuerpo aún presentaba en una mano un anillo de plata, lo que levantó las sospechas de la familia de Blanca en México, quien externó que ella utilizaba una argolla parecida.
El día de hoy, fueron revelados los resultados de la necropsia del cadáver mutilado: es Blanca Arellano Gutiérrez. El reporte forense indica que el cuerpo tenía cortes realizados por alguien con conocimiento de técnicas de necropsia. El rostro le fue retirado con la intención de que no fuera reconocida y los cortes fueron evaluados por el médico forense, como “perfectos”. Las huellas digitales de sus manos fueron borradas, además de que el cadáver carecía de vísceras y órganos.
Es de mencionar, que no es la primera vez que Juan Pablo Villafuerte tiene problemas con la ley, pues en 2016 fue denunciado por su ex esposa por agresión física. Ahora, el estudiante de medicina enfrentará los cargos de feminicidio, trata de personas y tráfico de órganos.
