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En el marco del 14 de febrero, Cristóbal Arias y su esposa María Ortega Ramírez realizaron este día un recorrido por el centro de Morelia para obsequiar rosas a las personas que encontraban a su paso, como símbolo del amor y la amistad que deben reinar todos los días y no sólo un día del año.
Cristóbal Arias aprovechó este recorrido acompañado de su cónyuge para enaltecer y promover los valores del amor y la amistad como una forma de convivencia en sociedad, además de la buena intención, el aprecio y la cordialidad que representan en particular las rosas de color rosa.
El senador con licencia y María Ortega estuvieron acompañados por jóvenes, hombres y mujeres que los siguieron en la caminata que partió desde el centro de la ciudad, a la altura de la majestuosa Catedral moreliana, y continuó su paso sobre la Av. Madero.
Con rosas en mano, caminaron por la avenida obsequiando docenas de flores a las personas que cruzaron en su camino, desde quienes transitaban en solitario, como aquellas parejas tomadas de la mano e incluso jóvenes médicos, cuya profesión los hace estar en la primera línea de batalla contra la pandemia de Covid-19.
A ellos, identificados por sus características batas y vestimenta, dirigió algunas palabras e hizo un especial reconocimiento por su noble y valiente labor, pues todos los días arriesgan incansablemente la vida por salvar las de los demás, demostrando su amor por la gente y un gran compromiso con su vocación.
En el trayecto, Cristóbal Arias también fue objeto de una grata sorpresa al recibir como gesto de aprecio un tradicional gaspacho de frutas, regalo que aceptó con gusto y agradecimiento.
Deseando que la amistad y el amor estén presentes en la vida de cada una de las personas, el pequeño contingente hizo escala en algunos puntos emblemáticos de la ciudad, como la fuente de las Tarascas, el Callejón del Romance con su inolvidable poema “Romance de mi Ciudad” -del poeta Lucas Ortiz- y la Calzada Fray Juan de San Miguel, más conocida popularmente como Calzada de San Diego.
