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A una semana de la desaparición de los tres jóvenes de Peribán, los hermanos Bernardo de Jesús y Primo Cruz Medina, y su compañero, Édgar Jafet Tavira, quienes regresaban de Jalisco tras entregar un cargamento de aguacate, la esposa de Bernardo, -uno de los desaparecidos-, en entrevista telefónica negó que el crimen organizado habría tenido algún acercamiento con su familia, antes del pasado 03 de octubre, cuando perdió comunicación con su marido.
En el espacio informativo de Radiofórmula en Por La Mañana, Mariela Álvarez, conyugue de Bernardo de Jesús confesó que fue en el tramo carretero de Jiquilpan – Sahuayo cuando perdió contacto con los tres hombres, su esposo, su cuñado y el compañero con el que viajaban. Todos al mismo tiempo dejaron de contestar sus celulares al rededor de la 17:40.
Así mismo, Mariela dijo que Bernardo mantuvo comunicación en todo momento con ella por WhatsApp, incluso antes de desaparecer, le había compartido su ubicación y gracias a esto pudieron emprender las acciones de búsqueda a partir de su último registro.
«Hemos recurrido a la Fiscalía del estado de Michoacán y de la mano de ellos estamos trabajando para poder encontrarlos», comentó.
En este panorama, la mujer con la voz firme pidió orar para que sus familiares aparezcan con vida, asegurando que serían localizados.
Para precisar el punto exacto en donde perdieron contacto con sus allegados fue en la frontera que divide el estado jalisciense con Sahuayo, Michoacán, también conocida como «El corredor de la Muerte», conocida así una de las franjas más violentas e inseguras de México, pues es controlada por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Este mencionado tramo, fue donde circulaban los mencionados jóvenes, en su viaje de regreso.
