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Integrantes de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) señaló al gobierno de México de “satanizar” al azúcar, esto debido al nuevo etiquetado de productos impuesto por la Secretaría de Salud, las restricciones a la adquisición de comida chatarra en algunos estados de la república, e inclusive ciertas afirmaciones que responsabilizan al azúcar de las muertes por COVID-19.
Según lo detalló el presidente de la Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera (CNIAA), Juan Cortina, estos “ataques” del gobierno contra el azúcar amenazan a la industria y a los 500 mil empleos directos y 2.7 millones de indirectos que se generan con ella, amenazando a 267 municipios rurales de 15 estados.
“Pueden afectarse seriamente muchas familias del campo mexicano como resultado de las iniciativas que injustificadamente adjudican al azúcar de caña problemas de salud”, detalló Cortina a través de un comunicado.
Este lunes, la CNIAA detalló que el consumo de azúcar de caña ha caído en México un 36% en los últimos 25 años por cada habitante, por lo que esta “no puede ser la causa” del aumento en obesidad, diabetes y enfermedades similares que afectan la mortalidad por COVID-19, como detalla el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“El azúcar de caña simplemente no es responsable, como si lo pudiera ser el consumo al alza del jarabe de maíz de alta fructuosa y otros edulcorantes totalmente artificiales y sintéticos”, se aseguró.
