STAFF/ Margarita Arreola @Arreolamargui 
El automóvil Chevrolet color naranja, modelo 51, es una sensación por vender pan a bajo costo en su cajuela, pues con tan solo 2 o 3 pesos puedes adquirir pan dulce o salado y lo que es mejor en pleno centro de Morelia.
«Entre 2 y 3 pesos cuesta el pan; hay gente que solo me compra pan por el carrito, pero siempre regresan les gusta el pan «, comentó Josafat Joaquín Rodríguez, tercera generación en estar al frente de este negocio.
El joven narró que este coche es considerado una reliquia familiar pues fue propiedad de su abuelo Don Joaquín, quien lo compró en la década de los años 50’s, para vender zapatos. 
«Ya es tradición, el carro es de mi abuelo, lo saco nuevo de agencia es un modelo 51, hace mucho tiempo era para vender zapatos, él era zapatero, pero por familia de mi abuela se dedicó a vender pan», explicó emotivo su nieto.
De esa manera sus abuelos se dedicaron a vender pan en su carro clásico por mucho tiempo en la calle Vasco de Quiroga, pero hace dos años falleció la señora Lucita, dejando solo y desmotivado a Don Joaquín, quien murió un año después, razón por la que ahora la tercera generación es quien se encarga del negocio familiar. 
Siguiendo el legado de sus antecesores Joaquín Jr. tercero, todos los días de lunes a viernes de 6 a 7 de la tarde, llega volanteando el modelo 51, para posicionarse frente a la plaza de San Francisco y así vender su pan.
Debido a las obras que se realizan en la céntrica vialidad, tiene que colocarse en la entrada de la calle, «de hecho tuvimos problemas con los de Ayuntamiento, pero ya nos dieron chance de estar cuando menos una hora aquí», apuntó el muchacho.
Agregó que el coche es tan llamativo que ha recibido múltiples ofertas de compra, pero no lo vende por el gran valor sentimental que tiene dentro de la familia. 
Todos los días elaboran más de 600 panes que son horneados desde su casa y posteriormente colocados en canastas y bandejas que son puestas en la parte trasera del automóvil clásico listas para su venta.
