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Saliendo del clóset…Quienes hablan de #Suicidio pueden estar pidiendo ayuda o apoyo.

 

By: Raúl Martínez 

RAÚL

Hoy es el día mundial para la prevención del suicidio, un día donde en todo el mundo se deben realizar compromisos y medidas prácticas para prevenir el suicidio que al día de hoy va en aumento principalmente en poblaciones jóvenes. Cada día hay en promedio de acuerdo a datos de la OMS casi 3000 personas que ponen fin a su vida y se estima que hay al menos 20 intentos de suicidarse por cada uno que lo consigue. Este año el lema es “Trabajando Juntos para Prevenir el Suicidio”, resaltando el elemento de la colaboración en la tarea de prevención del suicidio.

 

Cada año se suicidan casi un millón de personas, lo que supone una tasa de mortalidad «global» de 16 por 100 000, o una muerte cada 40 segundos. En los últimos 45 años las tasas de suicidio han aumentado en un 60% a nivel mundial. El suicidio es una de las tres primeras causas de defunción entre las personas de 15 a 44 años en algunos países, y la segunda causa en el grupo de 10 a 24 años; y estas cifras no incluyen las tentativas de suicidio, que son hasta 20 veces más frecuentes que los casos de suicidio consumado.

 

Aunque tradicionalmente las mayores tasas de suicidio se han registrado entre los varones de edad avanzada, las tasas entre los jóvenes han ido en aumento hasta el punto de que ahora estos son el grupo de mayor riesgo en un tercio de los países, tanto en el mundo desarrollado como en el mundo en desarrollo.

 

A nivel mundial, no se ha atendido de forma adecuada debido básicamente a la falta de sensibilización e información sobre la importancia de ese problema y al tabú que lo rodea e impide que se hable abiertamente de ello. Es evidente que la prevención del suicidio requiere también la intervención de sectores distintos del de la salud y exige un enfoque innovador, integral y multisectorial, con la participación tanto del sector de la salud como de otros sectores, como por ejemplo los de la educación, el mundo laboral, la policía, la justicia, la religión, el derecho, la política y los medios de comunicación. ¡Todos somos responsables!

El comportamiento suicida viene determinado por un gran número de causas complejas, tales como la pobreza, el desempleo, la muerte de seres queridos, una discusión, rupturas morosas, problemas jurídicos, económicos o laborales, maltrato en la infancia, acoso, hostigamiento, el aislamiento social, pero entre los principales motivos que llevan a decidir el suicidio esta la depresión.

 

La depresión es un trastorno mental frecuente y aunque prácticamente todas las personas son propensas a sufrirlo, existen nichos poblacionales con mayor probabilidad de padecerla, entre ellos la comunidad LGB debido a que constantemente está expuesta a una carga extra de estrés causado por vivir en una sociedad que constantemente excluye, recordemos que nuestra sociedad se rige aun por normas culturales en torno a la idea de la heterosexualidad, es decir, estamos en una sociedad heteronormativa. Todo está basado en el poder y supremacía del hombre, macho que somete a la mujer y que es la única persona con quien puede formar una familia. Y ahí las Iglesias, bueno los intentos de líderes religiosos tiene mucha culpa, pues basta recordar que han impulsado un frente que sale ya a marchar y a exigir no se reconozcan otros modelos de familia, negando la posibilidad de educar en la sexualidad, de hablar incluso de problemas como el suicidio sin prejuicios morales. Ha quedado claro que el estrés, después de cierto límite, va a repercutir de manera importante no sólo en la salud mental, también en malestares físicos.

Cuando una persona crece y es educada en una sociedad donde ni siquiera se reconoce su existencia, donde los chistes, las burlas, el sometimiento a patrones y roles de género machistas están presentes de manera continua, las personas LGBT crecen con emociones como la tristeza, la culpa, la vergüenza y el miedo, las cuales están muy ligadas a trastornos del estado de ánimo como la depresión y la ansiedad.

La prevención del suicidio sigue siendo un desafío universal, es necesario unirnos para prevenir el suicidio. Requiere a la familia, amigos, compañeros de trabajo, miembros de la comunidad, educadores, líderes religiosos, profesionales de la salud, funcionarios políticos y gobiernos. Su prevención requiere de estrategias integradas que abarquen el trabajo a nivel individual, sistemas y a nivel comunitario. Es urgente la atención a la #SaludMental, pronto desde el colectivo #MichoacánEsDiversidad daremos a conocer los datos de contacto de profesionales de la salud mental a quienes podemos acudir para recibir ayuda, por lo pronto aquí estoy! Llamame,443 200 69 97, seguro podré escucharte, reír o llorar contigo, no estamos solas ni solos! ¡Ayudémonos!

Únete a nosotros y a muchos otros en todo el mundo que están desempeñando un papel en la prevención del suicidio.

 

Toma un segundo y tiéndele la mano a alguien que lo necesita, podrías salvarle la vida

 

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