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Fabio Martínez Castilla, el nuevo arzobispo de la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez, declaró que considera más grave que una mujer aborte a que un sacerdote abuse sexualmente de un niño.
El líder católico sostiene que cuando un niño es abusado sexualmente por un sacerdote “se muere su futuro”, pero que es peor que una mujer interrumpa su embarazo pues se trata de “un asesinato”.
“Entonces, cualitativamente es mucho más grave el aborto, pero cuantitativamente las dos cosas hacen mucho daño y merecen castigo”, dijo a los medios locales.
Para finalizar señala que los abusos sexuales a menores de edad no son hechos únicamente por religiosos: “aquel maestro, político, médico y todo aquel que atenta contra la bondad y libertad de un niño debe ser penado”, agregó que todos los sacerdotes que abusen de niños deben ser expulsados de la iglesia católica.
