Procesión Del Silencio, Una Tradición Espiritual De La Ciudad De #Morelia
STAFF/@michangoonga
Año con año, en completa oscuridad se realiza una peregrinación encabezada por 13 imágenes religiosas; algunas que datan de finales del siglo XVI y otras más de principios del XX. La capital michoacana se viste de púrpura para recibir el ritual católico más emblemático de la temporada: La Procesión del Silencio, donde se espera la participación de por lo menos 35 mil espectadores.
Es Guillermo Rodríguez el encargado junto a otras 2000 personas de darle vida al evento espiritual de mayor magnitud en el Estado, en el que, explicó participan devotos de 22 cofradías.
La organización de la Procesión del Silencio, nos contó, es una de las tradiciones michoacanas de mayor esplendor: el Arzobispo delegó en la Asociación civil Tradiciones Michoacanas, la patente para que ellos se hicieran cargo de la estructura. Ellos, los organizadores, tienen dos vertientes en su forma de operar: la logística; que es la relacionada a toda la organización, estructura y compra de enseres, mantenimiento de las imágenes, coordinación con los presidentes de las cofradías, etcétera, y por otro lado la propiamente religiosa, en la que las más de dos mil personas involucradas asisten a un retiro espiritual, se dan charlas enfocadas a la procesión y a la pasión de Cristo, se confiesan, comulgan y deben estar preparados internamente con los sacramentos desde ocho días antes.
Hay cofradías de parroquias, de movimientos apostólicos, particulares y de colonias; incluso hay una cofradía que se acaba de integrar de puros niños. Las cofradías son asociaciones que forman personas religiosas de la fe católica y que tienen fines piadosos o altruistas.
La primera Procesión del silencio se realizó en 1976 y desde entonces ha ido en aumento el número de participantes, toda vez que cada año van mejorando la infraestructura. La realidad, dijo, es que no hemos tenido mayores complicaciones en la organización por la excelente disposición de quienes participan de manera voluntaria, cada año es más grande así que se vuelve operativamente más compleja en su organización, por esa razón han aceptado la colaboración de las instancias de turismo, quienes “apoyan con el cierre de calles, logística, apagan las luces, con el sonido; nos refuerzan también con seguridad, bomberos, protección civil”.
“El único año en que ha cambiado la dinámica de la procesión fue en 2008, motivado por los sucesos en la plaza durante la ceremonia del grito de independencia, ese solo año caminamos con las luces encendidas, pero la misma gente exigió que se apagaran porque le restaba solemnidad”.
El evento se realiza en torno a la Virgen de Dolores, que es a quien veneran, porque representa el dolor que vivió María, la madre de Jesús, cuando lo vio morir en la cruz.
Esta peregrinación que tiene difusión mundial por su magnificencia, dio fama al barrio de Capuchinas que fue donde se originó y posteriormente en 1991 se cambió el recorrido a la avenida principal de la ciudad.
Cabe recordar que las procesiones llegaron a México como resultado de estrategia de evangelización de las diferentes órdenes religiosas. Y como parte del ritual, se recuerda la llegada de la Virgen de la Soledad a la Catedral, esto es desde el jueves Santo, lo que significa el comienzo del duelo que es anunciado con el sonido de la matraca de la torre poniente del templo.
El cucurucho que usan sobre la cabeza los participantes de la procesión se llama Capirote y fue tomado del usado en España por los inicios de la inquisición en el siglo XV. La prenda que cubre el pecho y la espalda de los penitentes se llama “Sanbenito” y las imágenes que desfilan en la Procesión del Silencio son llamadas imaginería.
Dentro de su simbología se utiliza el color rojo para recordar la realeza de Cristo y también su sangre derramada en la pasión; el púrpura como signo de penitencia durante la cuaresma y el blanco, que es el color de la alegría con el que se anuncia la resurrección.
La Procesión del Silencio en Morelia recorre las principales calles del Centro Histórico y hace parada en 11 balcones donde se pronuncian las Saetas.
