STAFF / Marco Antonio Duarte Aguilar
La Procuraduría General de Justicia de Michoacán (PGJ), detuvo a los directores de seguridad pública de los municipios de Álvaro Obregón e Indaparapeo, así como a 11 policías de ambas corporaciones, por su presunta responsabilidad en el «levantón», ejecución y la calcinación de 10 hombres, cuyos cuerpos fueron encontrados ayer en el municipio de Cuitzeo.
La fiscalía estatal capturó a los uniformados tras recabar el testimonio de familiares de más víctimas, quienes fueron calcinadas a bordo de una camioneta que fue abandonada a orillas del lago de Cuitzeo.
Los detenidos se encuentran a disposición de la Fiscalía Especial para Delitos de Alto Impacto, la cual interroga por separado a cada uno de los policías.