COLUMNEROSOTROS

Diario De Un Foráneo ¿Qué Esperas De La «Nueva Normalidad»?

Ay nanita, kemosión. Ya merito se acaba la Jornada de Sana Distancia, algo así como una graduación de la pandemia... ¿Qué nos llevamos?

By: Mariano Bolaños Montañez

Sí, lo sé, van varias semanas que en este espacio hablamos de la pandemia, pero a pesar de que mi misión con estas columnas es tratar de aminorar tus males en una vida foránea, no quiero dejar pasar la oportunidad de invitarte a reflexionar un momentirijillo, porque hay cada estupidirijillo suelto, que más vale prevenir.

Si bien, el domingo termina la Jornada Nacional de Sana Distancia (ese periodo impuesto por el gobierno en donde tienes que lavarte las manos un jodo, quedarte en casa y alejar a la gente 2 metros al rededor tuyo), todas las medidas sanitarias y restricciones van a seguir igual. Sólo poco a poco vamos a poder empezar a retomar una vida «normal», dependiendo de qué tanto se cuiden en nuestra ciudad/pueblo/rancho/municipio o como quieras llamarle.

Y bueno, en esas estaba cuando empecé a pensar en cómo van a ser las cosas del lunes en adelante, y me dije a mí mismo: «mí mismo, ¿qué hiciste durante todo este despapaye que dejó el chinito que se trago una sopa de Batman?».

Entonces, mi mente se quedó en blanco, pero luego, empezó a llegar a mi cabeza una diarrea de ideas de toooodo lo que ha pasado a lo largo de estos días, las oportunidades que tuve, lo que aproveché, lo que no aproveché, y lo efímero que fue el tiempo.

Y la verdad es que tuve sentimientos encontrados, porque hice unas cosas y no hice otras.

Pero después de deprimirme y consolarme yo solito, llegó de fregadazo la pregunta del millón: ¿Qué viene?

Y es que estimada lectora, estimado lector, si ya la k-gamos, no hay manera de desk-garla, lo que pudo significar ese tiempo, ya no fue, no está, no existe… Pero sí va a contar mucho qué es lo que haces a partir de ahora en adelante.

Así que si nos atarugamos un poco durante este tiempo, chance es buen momento para empezar a despertar y reaccionar, ya a estas alturas de la vida y con este 2020 que ha sido más malvado que Karla Panini, nos tuvimos que haber despejado y entendido que lo único seguro en esta vida es que algún día vamos a irnos a acompañar a Mamá Coco… Lo chévere es lo que podemos hacer en ese lapso.

¿Qué tal si tomamos este periodo que tuvimos para agarrar impuso y hacer aquello que dejamos inconcluso hace algunos meses? ¿Por qué no nos hacemos el tiempo de hacer aquello que antes no nos permitimos? ¿Qué tal si empezamos a mandar a la fregada a gente malintencionada que nomás nos chupa las buenas vibras y nos amarga la existencia?

En lo personal, te comparto qué es lo que espero de esta «Nueva Normalidad»: quiero darle fin a mi tesis (porque está más olvidada que una cartulina en domingo por la noche), aprender a darme mis tiempos y a organizar este desastre llamado «vida», recordarle a las personas que me importan cuánto las quiero (y a las que no, simplemente ignorarlas como López Gatell a los tapabocas), no desperdiciar el tiempo…

Y que quede por escrito, que el primer fin de semana después de que se nos diga «pueden regresar a sus actividades, la pandemia ha pasado», voy a invitarte a ti, a ti y a ti a irnos de parranda intensa toda la noche; así que vete preparando, porque será una de esas en donde terminas hablando ruso mandarín después de haber mezclado 6 botellas diferentes, de esas en donde amaneces en otro estado sin saber cómo demonios llegaste ahí, de esas en donde hiciste amigos sin saber de dónde salieron…

Pero mientras tanto, debemos ser más inteligentes de lo que nuestras decisiones están demostrando que somos, tratar de apoyarnos unos a otros en lo que se pueda, y ponernos las pilas para este último estirón… Si no, nunca lo lograremos completamente.

Botón volver arriba