SOFTNEWS

La política y los jóvenes // By @ManuelOchoa_

Manuel-Ochoa-El-Analista


Por Manuel Ochoa

México es un país de jóvenes, más de la mitad de los 109 millones de habitantes se ubica por debajo de los 29 años de edad, de ellos 11 millones se ubican entre los 15 y 19 años. En solo 10 años los jóvenes de hoy serán el 75% de la fuerza laboral en el mundo, y una  enorme fuerza electoral, con un chip político muy diferente al de sus predecesores.

México y sus partidos políticos se enfrentan a una nueva generación educada plenamente en lo digital, con una percepción y aproximación distinta de la política. El uso de  la tecnología ha cambiado la concepción del poder. Entre 80% y 90% de los jóvenes sabe utilizar equipo de cómputo e internet, más del 50% los utiliza como un medio de comunicación y fomentar sus relaciones de amistad, y al menos uno de cada diez utiliza las redes sociales para criticar o burlarse de autoridades o acciones gubernamentales.

Cada año se incorporan aproximadamente un millón de nuevos electores, dato importante que deben considerar los partidos políticos para fomentar el voto joven y promover candidatos jóvenes. A pesar de lo anterior, las instituciones y organizaciones tradicionales parecen no responder al mismo ritmo que los cambios de la ciudadanía digital conciben y reclaman.

Los jóvenes viven y han fomentado una economía colaborativa, la cual promueve modelos de innovación abierta, creación colectiva y talento compartido. Estos conceptos también son aplicados a la política, donde la inteligencia colectiva de multitudes crea un nuevo paradigma de gobernanza.

Los jóvenes no quieren solamente escuchar propuestas políticas, quieren ser parte de las mismas, desean construirlas en conjunto, fomentando la inclusión y la interconexión.

La política tradicional necesita valorar e impulsar el uso de la inteligencia colectiva en sus modelos de acción y en sus estructuras juveniles. Tradicionalmente se percibe a las fracciones juveniles de los partidos políticos como el medio para la obtención del voto joven, sin embargo en esta nueva dinámica dichos espacios de participación deben ser espacios de formación política de líderes, a través de la co-creación e incidencia directa en las políticas públicas.

Los jóvenes millennials son la insignia de una nueva ciudadanía que participa porque quiere, puede y sabe, todo a través del conocimiento en red que forma multitudes activas e inteligentes capaces de articular soluciones públicas para problemas complejos mediante entornos abiertos a través de la tecnología.

Esta generación usa el internet para informarse políticamente, vigilar, transparentar, debatir y denunciar, con la fiel creencia que el internet es una herramienta de la ciudadanía, la cual puede y debe ser utilizada para democratizar.

Es entonces cuando el activismo político toma una nueva dimensión, a la que las instituciones actuales necesitan adaptarse, ya que para los jóvenes este activismo es una forma de manifestar su creatividad, con un amplio abanico de oportunidades, creando una política global, influyendo en temas y problemas globales desde lo local, los jóvenes pasan de ser militantes políticos  a ser activistas políticos.

La participación política juvenil debe transformarse en participar para decidir, los jóvenes quieren relacionarse, influir, resolver y experimentar, no quieren ser receptores o actores pasivos, quieren participar en afrontar los retos actuales y futuros. El mundo que tienen no les gusta, y quieren transformarlo a través de la tecnología y una nueva forma de hacer política.

Sin embargo, los jóvenes también enfrentan graves problemas heredados por sus predecesores, son la generación más preparada de la historia pero con menos oportunidades laborales. Una tercera parte de los jóvenes de México no tiene posibilidades de acceder a servicio médico mediante la seguridad social. La mitad piensa que la falta de empleo es el principal problema del país.

La situación económica que viven genera desconfianza en la política, la cual se ve expresada en una creciente conciencia activa sobre el gran problema de la desigualdad, lo que origina un activismo político en contra de la elite económica, tal cual se vivió en países como España y Estados Unidos con los movimiento Indignados y Occupy Wall Street.

Esta realidad exige una transformación de las estructuras políticas tradicionales, a través de nuevos formatos, nuevos valores, nuevos líderes, al final de cuentas la llegada de una nueva generación con una nueva forma de hacer política.

La nueva política significa más acción, más comunidad, mejor legislación, y mucha más representación y participación.

La transformación y la llegada de esta generación es irreversible, las instituciones tradicionales necesitan adaptarse o simplemente morirán. Las demandas de los jóvenes con su nueva manera de comunicarse, pensar, y actuar no cesará y cada vez será más contagiosa a las nuevas generaciones con un alejamiento mayor de la vieja política.

De lo contrario, los jóvenes encontraran el camino fuera de las estructuras e institucionales tradicionales para crear y participar, menos candidatos jóvenes y menores espacios de  participación solo aseguran una caída abrupta de la vieja forma de hacer política cuando se convierta en un lastre para el funcionamiento del sistema político.

Los jóvenes son la fuerza ciudadana más importante para el futuro próximo, no hay duda de ello.

Twitter: @ManuelOchoa_

Manuel.ochoa.ayala@gmail.com

Datos estadísticos:

Gómez, S., Tejera, H., & Aguilar, J. (s.f.). La cultura política de los jóvenes en México. Obtenido de El Colegio de México:

http://culturadelalegalidad.org.mx/recursos/Contenidos/Estadsticas/documentos/La%20cultura%20politica%20de%20los%20jovenes%20en%20Mexico.pdf


Changoonga.com no necesariamente adopta como suyos los choros publicados en ella y deja en sus respectivos autores la responsabilidad de todos los pensamientos que aquí plasman, producto de las ardillas hiperactivas que habitan en sus cabecitas.

Si te gusta, ¡dale Like/ RT y comparte!

¿Tienes ideas y/o algo qué decir? Manda tu texto a columnachangoonga@gmail.com

Botón volver arriba