El matraquero del mesías // By Camila Cienfuegos
Por Camila Cienfuegos (Antaño flaca)
Los charlatanes llegaban a mi pueblo precedidos por merolicos que anunciaban la cura de todo tipo de males; desde cáncer, tumores y hasta mal de ojo. Incluso para quienes padecían calvicie, los astutos curanderos aseguraban mediante sus milagrosas pócimas, sacarle pelo hasta una bola de boliche.
En el mejor de los casos, solo se trataba de aguardiente pintado de vivos colores y aromatizados con plantas que si bien no curaban ningún mal, al menos los incautos pacientes se olvidaban de ello momentáneamente.
La vieja tradición de los lenguaraces curanderos de pueblo que, precedidos por sus pintorescos pregoneros prometían la cura de toda enfermedad no se ha extinto completamente, acaso han cambiado de giro, como el diputado federal perredista, pero convertido en obradorista, Fidel Calderón Torreblanca. Él se me figura a esos parleros que antecedían a sus patrones los curanderos; en este caso, a Andrés Manuel López Obrador; otro charlatán que promete la milagrosa cura de todo mal para la nación mexicana.
Con forzada ironía, tratándose de hacerse el simpático, Fidel Calderón, sigue intentando atraer reflectores montándose en la imagen del gobernador Silvano Aureoles, o mejor dicho, a sus costillas, fustigándolo, cuestionándolo a manera de fuego amigo. Dice militar en el PRD –partido que lo llevó al congreso por la vía plurinominal, igual que a la Senadora Iris Vianey- pero hoy reniega de él, y se asume literalmente en una suerte de matraquero que anuncia la buena nueva del señor de Tabasco.
Con este tipo de acciones que parecieran ser una especie de traición para el sol azteca, Fidel juega a dos bandas: muerde una mano fraterna que le dio carrera y proyección política y besa la otra con la esperanza de llegar a fungir como coordinador de campaña de AMLO en el Estado de Michoacán para la siguiente elección federal.
UN RESPIRO PARA EL PRD
El temor más grande de AMLO no es una candidatura surgida de alguna de las llamadas izquierdas lo suficientemente fuerte para hacerle sombra; es más bien es una hipotética pero factible alianza PAN-PRD que rompa definitivamente sus aspiraciones a la presidencia de la República.
Algunos la ven aberrante como si de agua y aceite se tratara, como una especie de forzada y necesaria enemistad que debe prevalecer por encima de la razón. Lo cierto es que en las últimas elecciones estatales en el interior del país, quedó demostrado que la unión azul-amarillo fue positiva.
AMLO lo ha comprendido, y paulatinamente ha comenzado a recular su despectiva actitud hacia el PRD. Y es que el PRD sin AMLO no es mucho pero… AMLO sin el PRD estaría muy lejos de ser presidente.
EL PERDÓN
EPN sí tiene que pedir perdón por la indignación que causó con el caso de la casa blanca. Y es que las dudas que se generaron a partir de la ambiciosa compra del oneroso inmueble por parte su esposa, Angélica Rivera, realmente lastiman la inteligencia de una sociedad que ve con malos ojos el amasar fortunas de manera grotesca y de dudosa legalidad. La Gaviota podría haber tenido el dinero del mundo a partir de su carrera en Televisa pero ¿invertir tantos billetes de esa manera? Reconozco que no tengo pruebas de la corrupción en ese tema pero, para esos casos pesa más la máxima popular que dice: “no hagas cosas buenas que parezcan malas”.
¡¡Excelente miércoles para todoooooooooooooos!!!
